Algo más de un año de vida tuvo en los medios de comunicación la llamada «Plataforma por el giro a la izquierda», un movimiento ciudadano que durante muchos meses del 2005 y del 2006 demandaba al gobierno municipal un cambio de tráfico que permitiera girar desde la calle Andrés Mellado hacia la plaza de Compostela, Fray Juan de Navarrete y Joaquín Costa. Alegaban que los residentes de esas calles solo pueden acceder por Benito Corbal y que si se le permitiera el giro a la izquierda se aliviaría el atasco permanente del cruce de Cobián Areal.
El colectivo recogió dos mil firmas apoyando su reivindicación, celebró una docena de concentraciones -aderezadas en ocasiones con reparto de castañas o de sidra-, llevó sus quejas a los medios de comunicación y al Concello, encontró eco en la oposición que incluso presentó una moción en el pleno... pero no obtuvo repuesta positiva. El gobierno local decía entonces que permitir ese giro a la izquierda supondría meter el tráfico en la plaza de Compostela.
Ahora, cuando hace dos años que se callaron aquellas voces críticas, el mismo gobierno local que entonces lo negaba va a permitir el giro a la izquierda. No en el punto en que se demandaba sino unos metros más allá: se invertirá el sentido de circulación en la calle Mariscal Pardo de Cela, de modo que los coches que circulan por Peregrina puedan entrar en dicha calle, salir por Virxe do Camino y Sagasta para acceder a plaza de Compostela y Fray Juan Navarrete.
El Concello anunció ayer que el próximo viernes entrará en vigor esta modificación, que es un anticipo del cambio de direcciones que afectará a una docena de calles y que se aplicará en diciembre.
El giro a la izquierda, pues, se hace efectivo esta misma semana. Sin apenas ruido por parte del gobierno y entre el silencio de quienes lo demandaron a voces hace dos años. Llega ahora, y lo hace casi de puntillas.