Trece municipios arreglarán el acceso a sus viñedos antes de la próxima vendimia
OURENSE
La que estos días está rematando será la última vendimia que muchos viticultores tendrán que afrontar transitando por caminos en mal estado. Al menos los de los ayuntamientos incluidos por la Xunta en el Programa piloto de desenvolvemento rural; una iniciativa que fue anunciada por el conselleiro del bipartito, Alfredo Suárez Canal, en agosto del 2008, y que ha sufrido varios cambios antes de llegar a ser una realidad con la firma ayer en Larouco.
La modificación más importante, y no exenta de polémica, fue la decisión de la actual Xunta de dejar fuera a los concellos de O Barco y A Rúa. Después se acordó el reparto del dinero entre el resto de municipios amparados por la denominación Valdeorras. Esto provocó la dilatación de los plazos hasta el punto de que han pasado dos vendimias desde que se anunció. Y todavía pasará la que está en marcha, aunque la idea es que sea la última.
Según afirmó el titular de Medio Rural, Samuel Juárez, ante los alcaldes de los Concellos beneficiados, la contratación de los trabajos se hará de manera inmediata, pero al estar a punto de entrar el invierno, lo más probable es que el grueso de las obras queden para primavera. «Na primeira metade do ano iranse executando», aseguró, para después resaltar que lo importante es que «as obras sexan útiles e duren». Aceptó la propuesta del regidor de Larouco, Joaquín Bautista, de que sean empresas de la zona las adjudicatarias. «Recollo a suxestión, porque aos ser obras de pequena entidade, dará opción ás da zona», dijo, eso sí, «sempre que entren en competencia».
Los concellos beneficiados (que estuvieron representados por sus alcaldes en un acto al que también asistieron el delegado de la Xunta, Rogelio Martínez, y el presidente de la Diputación, José Luis Baltar) son Nogueira de Ramuín (con 23.446 euros), A Peroxa (154.049), Castro Caldelas (165.319), Parada de Sil (124.854), A Teixeira (307.632), Manzaneda (158.353), Trives (86.961), O Bolo (271.948), Carballeda (96.137), Larouco (550.000), Petín (316.084), Rubiá (340.714) y Vilamartín (513.433). La mitad del dinero es aportado por el Ministerio de Medio Ambiente.