Las últimas coplas de Amando, sesenta años después

OURENSE CIUDAD

Veinte maios tomaron el Paseo, el día en que se jubiló su participante más veterano

03 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

No son buenos tiempos para la tradicional fiesta de los Maios. Con un pasado brillante, el Concello de Ourense lucha por recuperar la alta participación en una fiesta que conjuga la tradición y el arte, todo con el musgo y las flores como principales protagonistas. Que hubo tiempos mejores lo sabe bien Amando Iglesias Moure. Ayer fue su última vez, ya que anunció por escrito y de palabra que lo deja. Sesenta años después de que escribiera su primera copla y cuarenta de que elaborara su primer maio, lo deja por cuestiones de salud.

Visiblemente emocionado fue despedido por muchos de sus compañeros, y también por curiosos y amigos que le reconocen que forma parte de la historia de la Festa dos Maios. «Cada vez cústame máis, e decidín que era o momento de deixalo». Según explica, el pasado jueves salió a los montes del concello ourensano de A Peroxa para recoger el musgo necesario que le permitiera elaborar su última creación. El octogenario vecino de A Peroxa tampoco dejó de hacer su copla que, a modo de despedida, reivindicaba mejoras para el castillo de A Peroxa «Como este ano despídome das coplas e maios, informo os ourensáns dun castelo abandonado».

Más participantes

En la edición de este año aumentaron los maios a concurso, que pasaron de los 14 del 2009 a los 20 del 2010. Uno de los motivos que propició el incremento de colectivos participantes estuvo en la decisión municipal de otorgar una subvención de hasta 300 euros por participar.

De los 20 maios que se presentaron a concurso, 18 lo hicieron en la categoría enxebre y tan solo dos en la artística.