La provincia de Ourense está recuperando año a año su condición de espacio único dentro de la tradición festiva del entroido y a la oferta de los puntos emblemáticos del «triángulo máxico» y de lugares con una gran tradición en cuanto a personajes singulares -de los boteiros a los felos- se suman cada año nuevas ofertas y propuestas lúdicas. El centro de todas las miradas estuvo ayer en dos de los enclaves del triángulo máxico, Verín y Xinzo de Limia, por celebrar el domingo Corredoiro y salir los cigarróns y pantallas a la calle para anunciar la llegada del entroido (más información en la página 29).
Y a Xinzo y Verín se unieron otras actividades y propuestas organizadas por toda la provincia. En Boborás se celebró el Corredoiro organizando una comitiva que fue recorriendo los pueblos del municipio, acompañada de una charanga, para anunciar la llegada de Don Carnal y en la capital de O Ribeiro se organizó un domingo oleiro. La Praza da Madalena, de Ribadavia, fue el lugar elegido para llevar a cabo esta actividad.
En la ciudad no dejaron pasar la oportunidad de reivindicar su papel como espacio destacado para el entroido. En As Eiroás se celebró el «xogo das olas» y As Pitas volvieron a salir a la calle para demandar su protagonismo. En otra zona de Ourense, en Seixalbo, también volaron las «olas» y se organizó un recorrido festivo por las calles del lugar, hasta dejar a Paquita y Nicanor en la plaza.