El salón de plenos del Concello de Beade se abrió ayer a primeras horas de la mañana para la celebración de una sesión plenaria de carácter extraordinario, sin opción de preguntar, tercera del presente mandato, solicitada por la oposición socialista que incluyó en el orden del día, para su debate dos mociones, una reclamando la convocatoria de sesiones plenarias en el Ayuntamiento y otra pidiendo el cumplimiento de la ley de memoria histórica.
En ninguno de los dos casos los dos ediles del PSOE lograron la explicación que querían, ya que la sesión duró apenas quince minutos y no hubo opción al debate al erigirse el secretario municipal en protagonista del pleno al dar las explicaciones que los socialistas pedían el regidor, Senén Pousa.
Las discrepancias entre ambas formaciones fueron patentes desde el primer momento de inicio del pleno, que fue seguido por tres cargos del PSOE, José Prieto, Ignacio Gómez y Eladio Osorio, que acudieron en apoyo de sus compañeros. La oposición votó en contra del acta de la sesión anterior al no haberse reflejado en ella, según dijo el edil Benito Cibeira, los insultos recibidos por parte del regidor.
El secretario dio entonces paso a la lectura de la moción que pedía la convocatoria de sesiones plenarias y aclaró que aunque la corporación había acordado su celebración los últimos jueves de los meses pares, la convocatoria es potestad del alcalde, y éste lo hace cuando hay asuntos que tratar, por lo que propuso la votación tras esta exposición, algo que los socialistas rechazaron reivindicando su derecho a exponer sus puntos de vista pero que no pudieron dar al rechazar el PP su moción, con cuatro de sus cinco votos, ya que un concejal no asistió.
A la hora de analizar la propuesta del PSOE para aplicar la Ley de Memoria Histórica y eliminar los nombres del Caudillo y de Alférez Camilo Montero, en dos calles del pueblo, y los símbolos del yugo y las flechas de una fuente, el grupo de gobierno planteó, de nuevo a través del secretario, una contrapropuesta para dejar este punto para más adelante, ya que según un artículo que leyó, el Gobierno colaborará con las comunidades autónomas y las entidades locales en la elaboración de un catálogo de vestigios relativos a la Guerra Civil y que en estos casos la retirada es sólo una recomendación.
La oposición pidió, en aras de una mejor convivencia vecinal, un gesto de buena voluntad y que se cambien estos nombres franquistas por los de Cervantes, Rosalía de Castro o Miguel Hernández en un caso y de Manuel Polo, un maestro muy querido en Beade, invitando a la reflexión y a no moverse por la inercia. Su petición fue rechazada.
Al finalizar el pleno el PSOE criticó la actitud del secretario preguntando con ironía, por cuántos alcaldes hay y lamentando de nuevo la limitación de sus derechos como concejales. El regidor, por su parte, que confirmó, que ha recurrido la sentencia contra los ediles del PSOE por coger un folio, insiste en que no hay asuntos que tratar.