Limiar denuncia que el Concello prima los intereses privados en las pequeñas obras de los barrios

OURENSE CIUDAD

27 mar 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La federación vecinal levantó ayer la voz para expresar su malestar por la política que sigue el Concello de Ourense a la hora de realizar pequeñas obras y corregir deficiencias en los barrios. Según denunció el presidente de Limiar, Manuel Carnero, algunas concejalías del gobierno bipartito pasan por alto los trámites a seguir en estas actuaciones donde, asegura, priman más los intereses privados que los colectivos.

La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de Limiar se ha producido en el barrio de la Cruz Alta. En la calle Nuño de Ousende -próxima al auditorio municipal- la Concejalía de Seguridade ha instalado unas bandas rugosas que no son del agrado de la asociación de vecinos de la zona. «Se han colocado a raíz de una petición de un particular, que mira su interés y no se da cuenta de que no es el sitio correcto. Se saltan a la torera las formas y desprecian el trabajo desinteresado de las asociaciones, que son las que mejor saben lo que necesita cada barrio», explicó Manuel Carnero.

A partir de este caso, el movimiento vecinal denuncia un estilo de hacer las cosas prolongada en el tiempo que les hace sentirse «ninguneados» por el gobierno municipal: «Es una manera de despreciar el trabajo de las asociaciones. Nosotros solicitamos un arreglo a través de un colectivo vecinal y tardan un año en hacernos caso, mientras que va alguien con una amistad y se lo arreglan en una semana. Esta no es la manera».

Según indicó el presidente Manuel Carnero, la actuación de Seguridade en Cruz Alta no es aislada, ya que se trata de una queja generalizada de las 45 asociaciones que conforman la federación vecinal de la capital ourensana.