Reclaman que Ourense sea la sede de la pasarela gallega de la moda

OURENSE

07 sep 2007 . Actualizado a las 02:51 h.

Cuando todavía resuena el portazo del último taller textil que cesó su actividad en Ourense, empiezan a escucharse voces que reivindican la patria chica de Adolfo Domínguez o Roberto Verino como capital gallega de la moda. El grupo opositor de la Cámara de Comercio de Ourense pretende que la ciudad de As Burgas se postule como sede de la Cibeles gallega. Eso sí, aún no está claro si la promoción de la moda autóctona tomará forma de pasarela. La decisión saldrá del concurso de ideas convocado por la Xunta del que, según el empresario local Jorge Bermello Arce, Ourense no debe quedar al margen. Por eso, y como vocal de la Cámara de Comercio, pide a la entidad que tome cartas en el asunto aludiendo a las funciones de fomento del comercio exterior que le corresponden.

Se da la circunstancia de que las reclamaciones no vienen, únicamente, de un vocal de la Cámara que se encarga de representar a la oposición del actual presidente, Ovidio Fernández Ojea. Quien reclama que Ourense sea la sede de la pasarela de moda gallega es un hombre que conoce muy bien el mundo de la moda, de los talleres a las tiendas. No obstante, es el yerno de Jesús Domínguez, cabeza visible de Sociedad Textil Lonia o, lo que es lo mismo, las marcas Purificación García y Carolina Herrera. Pero la sensibilidad de Bermello tiene más fundamentos. Es sobrino político de otro as local de la moda, Adolfo Domínguez, y su mujer está inmersa en un proyecto de notable éxito: Bimba&Lola, la marca creada por la segunda generación Domínguez, que se ha convertido en la firma española de confección que más rápido ha crecido en todo el país, alcanzando una facturación de 20 millones de euros. La empresa, nacida el pasado año, cuenta con setenta establecimientos en España y Portugal.

Con este currículo familiar plantea Jorge Bermello una propuesta con seis puntos y la dirige a la Cámara de Comercio, de la que fue presidente su padre: realizar un diagnóstico entre empresarios y diseñadores para determinar las necesidades del sector; recoger las conclusiones en una memoria para presentar al concurso de ideas; pronunciarse sobre la posibilidad de relanzamiento de la pasarela Pontus Veteris que organiza la Cámara de Pontevedra; posicionar Ourense como sede del evento de promoción internacional que diseñará la Xunta; redactar un plan de apoyo a emprendedores y jóvenes diseñadores; y ofrecer la colaboración técnica de la entidad a las empresas que quieran participar en el concurso de ideas convocado por la Consellería de Innovación e Industria.

Más apoyos

Esos son los que deberes que tiene que hacer la Cámara de Comercio en opinión del grupo liderado por Bermello. «El sector textil ourensano se ha quedado huérfano de apoyos sin que los méritos de diseñadores, empresarios y emprendedores ourensanos del sector merezcan tal pasividad de la entidad cameral», apunta un comunicado del grupo opositor, Cámara Aberta.

La propuesta es también crítica: «Los dirigentes de la corporación cameral han incurrido de nuevo en pasividad e inoperatividad respecto a la defensa de los intereses del tejido productivo de la provincia». Cámara Aberta censura que Ourense se haya mantenido en silencio mientras otras entidades gallegas defendían su sector textil justificando su candidatura como sede de la hipotética Cibeles gallega.

A Jorge Bermello le sobran los motivos. La tradición textil, los nombres propios de la moda, la gestación ourensana de la marca Galicia Moda o la existencia, en la provincia, de una escuela de diseño -la de Allariz- son razones más que suficientes, apuntan desde Cámara Aberta, para que la ciudad de As Burgas se convierta en pasarela de Galicia.