Una guía reúne los 45 petroglifos más representativos de Galicia

maría conde PONTEVEDRA / LA VOZ

CULTURA

Antonio de la Peña y Buenaventura Aparicio firman esta obra divulgativa

29 nov 2011 . Actualizado a las 12:37 h.

Como dice el arqueólogo Antonio de la Peña, «non están todos os que son, pero si son todos os que están». El conservador de los fondos arqueológicos del Museo de Pontevedra y el historiador Buenaventura Aparicio firman la nueva Guía de petróglifos de Galicia, editada por Cumio y que reúne los 45 grabados más representativos del arte rupestre en la comunidad.

Ambos destacaron ayer en la presentación de la obra en Pontevedra que se trata de una guía «divulgativa, para que se coñeza mellor este patrimonio e se valore». Cada pieza se acompaña de la información precisa para su localización, conocimiento y disfrute, aderezada también con las distintas leyendas que la sociedad rural articuló alrededor de los grabados. «Custou anos -señaló De la Peña-, pero creo que a sociedade está asimilando que a arte rupestre é un fenómeno moi representativo de Galicia».

Ambos expertos coinciden en que en los últimos años se «modernizou» la investigación sobre los petroglifos. «Sabemos quen os fixeron, cando e por que -indicó De la Peña-. O que nunca saberemos é o seu significado, porque é unha sociedade completamente distinta á nosa, son formas de entender o mundo diametralmente opostas».

Por su parte, Buenaventura Aparicio criticó que antes de haber completado la catalogación, protección y musealización de los petroglifos gallegos, un paso previo a la solicitud para su declaración como patrimonio de la humanidad, la Xunta haya destinado al Parque Arqueológico de Arte Rupestre de Campo Lameiro una inversión cercana a los 12 millones. «Empezamos a casa polo tellado -señaló-. E tampouco me parece admisible se se solicita a declaración de patrimonio da humanidade só para os gravados do parque de Campo Lameiro. Porque eses están ben protexidos e ao que temos que ir é á protección da arte rupestre do noroeste peninsular».

«Crear un centro de investigación no medio do monte non parece operativo», concluyó por su parte De la Peña, que considera que este centro debería estar vinculado al museo.