Llega al Auditorio Mar de Vigo Wilco, el grupo que se ha convertido (merecidamente o no) en el espejo en el que se mira la música americana
05 nov 2011 . Actualizado a las 00:47 h.Lo de Wilco es así: o te lo crees o lo cuestionas, pero con la boca pequeña. Nadie puede negarles méritos a los de Jeff Tweedy, pero asegurar que llegaron para salvar al rock made in USA de una merecida eutanasia quizá sea demasiado. Puede que todo sea cuestión de contexto. A mediados de los noventa la última aventura musical que había llegado desde América, el grunge, se había suicidado o insistía en hacerlo. Y llegaban desde las islas británicas nuevos ritmos hechos en Bristol mientras Oasis y Blur se daban codazos. Pero justo cuando muchos se disponían a celebrar la enésima muerte del rock and roll, llegó un grupo nacido de las cenizas de Uncle Tupelo para devolverles la fe. Lo hacían con su segundo disco, Being There, que se abría con una canción, Misundertstood, que sonaba seria, adulta, solemne frente a la liviandad del brit pop. El resto del álbum resultaba nuevo y emocionante a pesar de revisitar referencias mil veces conocidas y prestaba la disculpa definitiva para poder acercarse a algo tan poco sofisticado entonces como el country. Algo pasaba con ese grupo, Wilco, la gran esperanza blanca del rock, que lejos de defraudar en sus trabajos posteriores firmó tres clásicos inmediatos de forma consecutiva en cinco años -Summerteeth, Yankee Hotel Foxtrot y A Ghost Is Born- para después mantenerse en un statu quo en el que, si bien hace tiempo que no sorprenden, desde luego tampoco defraudan. Un gran grupo, sí, pero ¿el mejor?
VIGO | Hoy | Auditorio Mar de Vigo | 20.30: Jonathan Wilson | 22.30: Wilco| Precio: 40 euros