La Orquesta Sinfónica de Galicia y los míticos The Chieftains arroparán hoy en el Obradoiro al gaiteiro vigués
11 sep 2010 . Actualizado a las 04:23 h.Primero fueron Muse y Jónsi; después Arcade Fire; y hoy le toca el turno, en plena plaza del Obradoiro, a Carlos Núñez, arropado por los legendarios The Chieftains y por la Orquesta Sinfónica de Galicia.
Lo que va a ocurrir esta tarde-noche en pleno corazón de Compostela es un sueño hecho realidad. Así lo dijo ayer el propio Núñez, ese vigués internacional que, siendo un chaval, coincidió con unos irlandeses maravillosos en Bretaña y ya nunca nada fue lo mismo. Los protagonistas de la cita de esta noche avanzaron ayer en el pabellón de Galicia, en San Lázaro, algunos detalles sobre el programa. Y los dientes no pueden estar más largos.
El gerente del Xacobeo, Nacho Santos, se refirió a «uno de los conciertos más esperados y espectaculares», y lo dice él, responsable último de que instituciones como Muse o Arcade Fire hayan aterrizado en Compostela. Se trata del primer concierto sinfónico que Carlos Núñez ofrece en Galicia, en un espacio simbólico como es el Obradoiro y en un año señalado. «Será un espectáculo cheo de emotividade e sorpresas», dijo Santos. La entrada es libre y, a partir de las 19.00 horas, empezarán a funcionar los controles de aforo. Una vez que la plaza esté completa ya será tarde. El gerente de la Sinfónica de Galicia, Oriol Ponsa, mostró una satisfacción enorme por poder compartir escenario con artistas de la talla de Núñez o de los propios Chieftains. Y mientras Ponsa mostraba su entusiasmo en la presentación de ayer, un irlandés bajito y arrugado de ojos azules prestaba atención a las indicaciones de una traductora. Del bolsillo de su chaqueta asomaba el culo de una flauta irlandesa. ¿Quién, además de Paddy Moloney, se lleva un tin wistle escondido a una rueda de prensa? El irlandés recordó los tiempos en los que conoció a Carlos -Carliños se le llamaba entonces cariñosamente en Vigo-, un músico como la copa de un pino metido en el cuerpo de un chaval flaco de 16 años. «Tocar en Galicia es hacerlo en casa, con Carlos hemos recorrido el mundo y con él tenemos un Grammy por el disco Santiago», señaló.
La Sinfónica de Galicia estará a las órdenes del director de la RTÉ National Symphony Orchestra of Ireland, que confesó ayer que se le habían puesto los pelos de punta cuando vio el gigantesco escenario que se ha montado en el Obradoiro.
«É unha emoción, levamos moitos anos construíndo isto», dijo Carlos Núñez, que hizo un símil entre las experiencias musicales que se mezclarán en el concierto de hoy con el propio Camino de Santiago. Y así, junto a Paddy Moloney y los suyos, el hombre que le abrió a Núñez «as portas do ceo», el solista, más acompañado que nunca, avanzó que serán dos horas llenas de sorpresas sobre las que guardó celoso secreto. Solo se sabe que al escenario se subirá también una banda de gaitas cuyos miembros han sido seleccionados por el propio músico. Pero habrá mucho más.