«No soy un predicador. Quiero que los oyentes usen su imaginación al escuchar mi música»

La Voz

CULTURA

11 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Si Sakamoto pretende dejar huella con su música en el oyente, con respecto al medio ambiente su actitud es la opuesta. Desde que en 1994 sustituyó el envoltorio plástico por un cartón biodegradable, no ha dejado de dar pasos encaminados a mejorar la relación del hombre con su entorno natural. Su sello discográfico, Commons, utiliza energías renovables. Su música también participa de esta filosofía.

-«Ice» y «Glacier», incluidos en «Out of noise», parecen tener una vinculación directa con su compromiso medioambiental. ¿Cómo traduce a música sus convicciones ecologistas?

-En Glacier quería idealizar lo que sentí cuando fui el año pasado a Groenlandia. Ese viaje ejerció en mí un gran impacto. La amplitud de los paisajes, el frío gélido, los icebergs... de algún modo idealicé lo que sentía ante esa naturaleza. Utilicé algunas grabaciones que realicé allí, como el sonido del hielo derritiéndose en el glaciar. También grabé el sonido subacuático del océano cerca de un iceberg inmenso. Pero no pretendía transmitir ningún mensaje sobre cuestiones medioambientales, aunque quizá pueda sentirlo. No hay mensaje ni político ni social: es una libertad total.

-Algunos mensajes son muy fáciles de lanzar, pero luego difíciles de respaldar con hechos. Un ejemplo reciente fue la última gira de U2, cuyas emisiones de CO2 (65.000 toneladas) equivalen a un vuelo de ida y vuelta a Marte.

-[Pausa]. No soy un predicador. No quiero forzar a mis oyentes a escuchar mensajes de nada. En lugar de eso, lo que quiero es que mis oyentes utilicen la imaginación cuando escuchen mi música.

-Usted ha colaborado con directores de cine muy distintos, de Almodóvar a Oliver Stone. ¿Cómo adapta su trabajo al suyo?

-No tengo un método en particular para ello. Depende de la comunicación y la relación que establezca con el director. Soy muy abierto y flexible, pero la fuente de inspiración más importante es la propia película. Necesito ver la película, que es la que me dice qué clase de música requiere. Claro que tenemos que hablar y usar muchas palabras, pero, más que el lenguaje, lo importante son las imágenes.