La última exposición del ciclo reúne 51 obras de grandes artistas contemporáneos gallegos e internacionales
06 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.La sede de la Fundación Caixa Galicia de Santiago exhibe desde ayer la cuarta y última exposición del ciclo Miradas , en que cuatro de los comisarios más importantes del Estado han analizado los fondos plásticos de la pinacoteca de la primera entidad financiera gallega. La muestra, titulada Cara ao paraíso. Un diálogo coa arte galega e as vangardas internacionais , está comisariada por Fernando Castro, uno de los más reputados expertos internacionales, y propone una reflexión artística entre el arte gallego contemporáneo y la vanguardia internacional. Para ello, reúne en Santiago 51 obras realizadas por los más importantes artistas gallegos, como Lugrís, Luis Seoane, Díaz Pardo, Laxeiro o Lamazares; y algunos de los grandes maestros de la vanguardia internacional como Chagall, Braque, Wifredo Lam, Picasso, Dalí o Miró, entre otros.
La colección de arte contemporáneo de la Fundación Caixa Galicia se inició hace trece años siguiendo dos líneas: una gallega, con todos los artistas de esta tierra; y otra internacional con obra de los artistas más destacados. Hoy en día, según señaló Teresa Porto, gerente de la Fundación Caixa Galicia, la colección cuenta con 1.500 obras de 300 artistas. Un objetivo de la Fundación ha sido exponer todo este arte con una o dos exposiciones anuales. Con motivo del veinte aniversario de la Fundación, que se celebra esta año, la entidad ha querido hacer algo especial, para lo cual pidió a cuatro comisarios de relevancia aplicar su mirada a la colección. La cuarta «mirada», de Fernando Castro, es la exposición más internacional de la colección y estará abierta al público hasta el 30 de marzo.
Fernando Castro puso de relieve en la presentación de Cara ao paraíso que no había querido hacer una exposición que no fuera cronológica ni lineal sino que «permitiera tener un diálogo sobre distintos aspectos de la colección, relativizando el concepto de lo internacional». Para el comisario, la exposición de la Fundación Caixa Galicia recrea un diálogo del arte gallego consigo mismo, «un diálogo del arte gallego con lo que el arte gallego tiene de arte internacional», entendiendo que «quizás la mejor forma de ser internacional es ser radicalmente local».