El hombre que quiso embarazar a Superman

CULTURA

Pasqual Ferry y Vittorio Giardino, en Viñetas desde o Atlántico

14 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Dos modos opuestos de entender el cómic, pero ambos un referente claro en la historieta de los últimos treinta años. Los musculados superhéroes que el catalán Pasqual Ferry realiza actualmente para Marvel se encontraron ayer con el fino y elegante trazo del espía Max Fridman, del italiano Vittorio Giardino, en el Kiosco Alfonso de A Coruña, dentro del Salón de Cómic.

La charla que dio el primero -más bien un diálogo compartido con su compañero generacional Miguelanxo Prado- fue un repaso a su carrera, llena de altibajos comerciales, que no creativos. De sus años dedicados al humor a sus trabajos más personales, como Crepúsculo o Sebastián Gorza, terminando en su actual labor en el mercado americano: «En los ochenta no había ni Internet, pero sí mucha ilusión y un mercado que terminó viniéndose abajo», recordó Ferry sobre la era dorada del tebeo español. Ya de su etapa americana, y aunque actualmente sus pinceles estén al servicio de Marvel, habló de su paso por la otra gran editorial, DC, en la que propuso que Superman se quedase embarazado para atraer audiencia: «Era un embarazo empático, típico de Krypton, con el que perdía los poderes. Pero la idea no gustó».

Por su parte, el maestro italiano Giardino hizo un pormenorizado repaso por la detalladísima documentación de la que se sirvió para elaborar su obra No pasarán, ambientada en la Guerra Civil Española, una trilogía «en la que he estado trabajando siete años. Así que espero que esta visita a A Coruña ponga fin a mi relación con España al menos por un tiempo», explicó entre risas.