La Justicia tumba el intento de una promotora de construir en el monte vecinal de Arcade
REDONDELA
Una inmobiliaria proyectaba una urbanización de 11.142 m2
09 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha tumbado las pretensiones de una conocida promotora de Arcade de hacerse con más de una hectárea de monte vecinal para llevar a cabo una promoción inmobiliaria. La constructora Arado SL reivindicaba un terreno de 11.142 metros cuadrados situados en la parroquia de Arcade, justo en el límite con el Ayuntamiento de Redondela. Pero la comunidad de montes de Xesteira se opuso al proyecto desde un principio al entender que esa superficie es parte integrante e inseparable de sus dominios de Puntal y Mesachá.
En su día, cuando se tramitó el deslinde administrativo de este monte vecinal, Arado SL ya intentó que se excluyera de perímetro del monte vecinal esa parcela de más de una hectárea, lo que fue rechazado por el ingeniero operador que propuso el deslinde incluyendo los terrenos como parte integrante del mismo. Y así se aprobó el amojonamiento por parte de la Consellería de Medio Rural el 18 de diciembre del 2008.
El juzgado de primera instancia número de Redondela dictó sentencia el 7 de enero del 2015 por la que desestimó la demanda de Arado SL, imponiéndole las costas del procedimiento, por entender que la demandante no había acreditado la titularidad sobre el terreno en litigio. «La prueba practicada confirma la titularidad de la Comunidad de Montes Vecinales en Mano Común de Xesteira sobre los terrenos litigiosos», señala la sentencia. La promotora recurrió ante la Audiencia Provincial de Pontevedra, que desestimó el recurso de apelación. Finalmente, Arado presentó recurso de casación ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que ha acabado desestimándolo.
La abogada Cristina Bugarín, que representa a los comuneros, señala que «esta sentencia constituye un gran éxito para la Comunidad de Montes Vecinales de Manco Común de Xesteira, pues durante años ha venido luchando frente a los intentos de apropiación de su monte vecinal por parte de Jesús Fuentes Pérez, bien a través de la mercantil Itaipu-Trade o a través de la mercantil Arado».
La letrada de los comuneros explica que el origen de todo este litigio se remonta al año 1964. Entonces, Francisco Vilán y Ramona Alján era los propietarios de una finca de 16.652 metros cuadrados. El terreno de monte bajo estaba situado en Redondela en el límite con el municipio de Soutomaior, con la parroquia de Arcade. El suelo se dividió entre los cuatro hijos del matrimonio con un lote de 4.163 metros cuadrados, siempre dentro de Redondela.
La viuda de Juan Vilán, uno de los herederos, le vendió su parte a la constructora en enero del año 2002. Pero curiosamente, según la abogada de los comuneros, los 4.163 metros de esa cuarta parte de la finca original heredada se convirtieron en 11.142, que es lo que aparece en la escritura del año 2002. Cristina Bugarín sostiene que este aumento de superficie se hizo a costa de la comunidad de montes vecinales. «Se apropiaron de terrenos», subraya la abogada.
La letrada pone de relieve que esta superficie Arcade han sufrido ya diversas ocupaciones por parte de otras personas que no eran comuneros, sus legítimos propietarios.
La compraventa de los terrenos se hizo en plena burbuja inmobiliaria. En el año 2000 el empresario gallego Jesús Fuentes, que se encontraba en Brasil, retornó y montó una promotora constructora en Arcade. En aquel momento el municipio despegó como ciudad dormitorio a caballo entre Vigo y Pontevedra ofreciendo una vivienda de calidad nueva a precios más baratos que las dos urbes. En esa época la constructora puso en macha permutas de terrenos a cambio de pisos en los nuevos edificios. Esa estrategia les causó algún quebradero de cabeza y judicial porque algunos de los vecinos que permutaron su fincas se quejaron de que los pisos no tenían realmente las dimensiones pactadas previamente.