Primera cosecha de seta china en los montes de Gondomar

m.torres gondomar / la voz

GONDOMAR

El hongo  que promueven los comuneros de Couso se cultiva sobre troncos de roble y castaño.
El hongo que promueven los comuneros de Couso se cultiva sobre troncos de roble y castaño. m. torres< / span>

Los comuneros de Couso han cogido 50 kilos y preparan 1.800

20 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La primera cosecha de setas chinas cultivadas en los montes de Couso ya está vendida. Han sido solo 50 kilos, pero suficientes para conocer la aceptación del producto y afianzarse en un sistema con el que la comunidad de montes prepara otros 1.800 kilos. El presidente de la comunidad de montes de Couso, Xosé Antón Araúxo, hizo públicos ayer los resultados de la campaña con la que abren uno de sus proyectos de generación de empleo y explotación sostenible del medio. «El rendimiento anual de una hectárea de eucalipto es de unos 475 euros, el de setas en medio año y 600 metros cuadrados rondan los 180 euros», explica. La comparación pretende servir de ejemplo de la política que, desde hace años promueve esta comunidad de montes.

«Tenemos mucha más capacidad de generar empleo en los montes que lo que dan los eucaliptos», reivindica. La comunidad de montes ha contratado a cuatro personas gracias a estos proyectos de diversificación forestal. Esta seta china es el Shiitake, un hongo que se inocula en trozos de madera con cualidades gastronómicas y terapéuticas.

A Froitas Vilar se le ha vendido el fruto de los 300 primeros troncos de robles y castaños preparados en la zona de As Rasas. Ahora hay ya inoculados otros 700 que estarán listos para la recolección en Navidad. El kilo se vendió a 6 euros aunque al consumidor final llegó a 12 euros. Ahora la comunidad de montes tramita la obtención del certificado de producción ecológico, un aval que además de asegurar la trazabilidad de su producto, permitirá incrementar ligeramente el margen de beneficios.

Aún así y ya con las primeras cuentas hechas, para la comunidad ya está clara la rentabilidad. «Ojalá todas las comunidades de montes planificaran alternativas sostenibles económicamente porque sí se puede generar empleo en los montes gallegos si se diseñan este tipo de políticas», destaca Xosé Antón Araúxo.

En su línea de diversificar, apuntan ya nuevas posibilidades para el Shiitake, como su comercialización deshidratado y en conserva. «Es que hay que buscar estas alternativas, como hay otras comunidades de montes que están apostando por las cabras o los olivos», defiende.

La comunidad de Couso presentó el proyecto por primera vez en julio del 2011 ante la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural en busca de financiamiento. Los trámites burocráticos dilataron la consecución de la subvención hasta julio del año pasado. La Xunta financia, con fondos europeos del Plan Leader, el 30 % de los 30.000 euros con los que arranca su último proyecto. El resto del dinero lo han conseguido gracias a microcréditos de vecinos de Couso y comuneros. Este cultivo supondría pues unos ingresos a la comunidad de unos 18.000 euros al año. «Son cerca de 360.000 euros en 20 años, que es el tiempo que tardaríamos en que crecieran los eucaliptos, destaca Araúxo. A la rentabilidad económica se le suma la del propio cultivo, ya que para que el sistema chino precisan 1.000 metros cuadrados mientras que para los eucaliptos hacen falta 20.000.