Ojos tapados

Carlos Punzón
Carlos Punzón PUNZADAS

VIGO

04 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Asistí a la conferencia que hace unos días pronunció el alcalde de Vigo confiado en que ante un público afín, con numerosos cargos socialistas por mesa redonda, con empresarios entregados y con representantes de concesionarias presentes para que no le pusiesen falta, Abel Caballero se sentiría lo suficientemente protegido como para dar una mínima versión, aunque fuese de parte, sobre por qué el Ayuntamiento está inmerso por primera vez en su historia democrática en varias investigaciones judiciales y de la Fiscalía por supuesta corrupción. Tres cuartos de hora dieron para que el regidor luciese sus conocimientos en economía, para que trazase una ciudad ideal, dispuesta a la batalla con quien sea y merecedora de varias medallas desde que él la gestiona. Pero nada de nada sobre el registro policial de los despachos de dos de sus ediles más cercanos; nada tampoco sobre la imputación de su concejal de Parques y Jardines (por cierto, que se multiplicó en sonrisas y apretones de manos para evidenciar su tranquilidad), y nada de nada sobre las investigaciones de supuestas tramas de enchufes. «No habló sobre corrupción porque ese sería el titular», se le escapó en los doce minutos del turno de preguntas después de rechazar una directa sobre su valoración sobre el reguero de casos y, en concreto, sobre los que afectan a su gobierno municipal.

Pero Caballero no solo no quiere hablar, en realidad no quiere ni ver, como están haciendo decenas de políticos clásicos que esperan que pase el temporal, que lo de Podemos se quede en nada y poder reenganchar cuatro años más. Si hubiera dicho algo se habría acercado a la preocupación social por el sobresalto social diario. Pero no, prefirió hablar de Keynes, de Hayek o Mises y de quienes teorizan sobre el dinero público, en lugar de hacerlo de las dudas de la Justicia sobre su utilización en el Concello de Vigo.

@carlospunzon