Roban 6 toneladas de abono en Oia que solo vale para eucalipto

Monica Torres
mónica torres OIA / LA VOZ

VIGO

Los propietarios advierten a los ladrones que quema otras plantaciones

29 may 2013 . Actualizado a las 17:46 h.

En los montes de Loureza, en Oia, han desaparecido seis toneladas de abono mineral. El robo de plantas o de otros materiales en zonas agrícolas o de monte no es extraordinario, aunque pocas veces llegan a denunciarse. Pero en este caso hay sorpresa tanto para los propietarios de la mercancía como, posiblemente, para los ladrones.

«Estoy seguro de que quién se llevó esta mercancía no sabe lo que es», asegura Carlos Rodríguez Campelos. Es el encargado de la plantación de eucaliptos que la empresa Energía y Celulosa (Ence) ha realizado en una parcela de 50 hectáreas alquilada a la comunidad de montes de Loureza. Para este trabajo se subieron al monte 12.000 de los 24.000 kilos del abono preparados específicamente en Asturias para la implantación de eucaliptos y que se trajeron en un tráiler el 15 de mayo.

Se utilizaron los primeros mil kilos en Loureza pero, durante el descanso del puente de mayo, trabajaron los ladrones y durante ocho horas. Es el tiempo que como mínimo, precisaron para poder acarrear las sacas, según los cálculos de la empresa. Para Ence, las pérdidas económicas ascienden a 3.000 euros y además este percance supone un importante retraso en el trabajo ya que hay que esperar a hacer un nuevo pedido completo y transportarlo. Pero el saldo parece que también va a ser negativo para los ladrones ya que el abono solo sirve para eucaliptos. «Es insólito por la cantidad pero sobretodo porque si se utiliza este abono para cualquier otra especie puede quemar una plantación entera», advierte Carlos Rodríguez, con más de tres décadas de experiencia. No busca que los amigos de lo ajeno desistan, porque el abono ya se acabó, pero no solo les aconseja que no lo utilicen «porque quema, incluso nosotros lo ponemos a 30 centímetros de las plantas». «Estoy dispuesto a ir a buscarlo donde lo tengan, sin represalia alguna», afirma consciente de que la invitación puede ser tan inservible como el propio abono a los ladrones .

Para estos las pérdidas pueden incrementarse en función del uso que le hayan dado. Pero hay unos gastos mínimos muy a la baja difíciles de compensar con la mercancía. Las rodaduras indican que se utilizó un coche. Y los cálculos sobre el terreno que se precisaron al menos ocho horas para cargar 150 sacos de 40 kilos y recorrer 25 veces el trayecto de 10 kilómetros monte a través que separan la zona de la primera vía asfaltada; a una media de seis sacos por viaje. Si el abono se mal empleó, en diez días puede haber una evidencia clara sobre campo.