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Alemania compra tecnología 100 % gallega

María Viñas Sanmartín
María Viñas REDACCIÓN

OCIO@

Una importante firma europea de libros electrónicos incorpora en su tienda «online» el sistema de búsqueda de Colbenson, un «software» desarrollado en Ferrol que, gracias al estudio del contexto y el análisis de las redes sociales, sabe casi con exactitud lo que el cliente busca

03 dic 2012 . Actualizado a las 14:21 h.

Convertir las visitas en clientes. Este es el gran reto de las empresas que, convencidas de que en las autopistas virtuales está el futuro del mercado, se han arriesgado a meter la cabeza en el cambiante y acelerado universo de Internet, tierra prometida del despegue económico. Y es justo en esto, en conseguir que el usuario que llega a una web acabe consumiendo, en lo que se ha especializado Colbenson, una firma tecnológica experta en herramientas de conversión de búsquedas. ¿Cómo? Optimizando y afinando las exploraciones internas en las webs hasta conseguir que, gracias a la interpretación sobre lo que busca el usuario y el estudio de las redes sociales, los motores de búsquedas sepan exactamente lo que el usuario necesita.

Con sus oficinas centrales en el Reino Unido y sedes en Madrid, Barcelona y Nueva York, el diamante en bruto de Colbenson se pule, sin embargo, en esta esquina del mapa. Sus oficinas ubicadas en Ferrol acogen a las 16 cabezas pensantes que desarrollan el motor de la multinacional: una tecnología cien por cien gallega que se puso en marcha en el año 2008 y que, avalada por importantes firmas españolas como Mango, Springfield o Casa del Libro, ya ha traspasado las fronteras nacionales. Fe de ello da el último acuerdo cerrado por Colbenson con la compañía alemana de venta de libros electrónicos TXTR, una importante «puntocom» que cuenta con un inmenso catálogo integrado por más de 700.000 ejemplares, orientado a un mercado internacional y disponible en nueve idiomas y en más de doce países. Con este paso en firme, la compañía gallega se embarca en un innovador proyecto junto a la librería electrónica, que ha seleccionado su sistema de búsquedas, Searchbroker, como el más adecuado para responder a sus necesidades y conseguir que sus clientes accedan de la forma más rápida, fácil y eficaz a sus productos.

«El usuario que va al buscador de un tienda online es un comprador comprometido, un cliente que sabe lo que quiere, que tiene siete veces más probabilidades de comprar que el que echa un vistazo por la web». De esta forma explica Ángel Maldonado, director de Innovación y Estrategia de Colbenson, el valor que aporta a una empresa que vende en Internet incluir un buscador en su web. Aumentar las ventas, consiguiendo que el potencial cliente encuentre justo lo que está buscando, es el objetivo principal de los sistemas de búsquedas. Pero no es fácil dar en el clavo, devolverle al usuario justo la idea que se le pasa por la cabeza cuando introduce un término concreto en la caja de búsquedas. Y del éxito de ese resultado depende que el cliente siga adelante con la compra, que vuelva a probar suerte con una nueva búsqueda o que abandone la página para encontrar lo que quiere en otro lugar. Esta idea fue la primera que interiorizó Colbenson para desarrollar su motor de búsqueda. Y la que diferencia su sistema de navegación de su competencia en el mercado.

El buscador que estudia el contexto, que sabe «de lo que se habla»

Searchbroker es capaz de ofrecer a los clientes resultados más precisos y afinados gracias a un algoritmo -tecnología de última generación Empathy- que «entiende el contexto y la intención del comprador», explica Maldonado. La tecnología del buscador arrojará unas respuestas más cercanas a lo que el cliente quiere porque «sabe» de lo que la gente habla gracias al análisis de las redes sociales. Colbelson ha conseguido que su software estudie temas de conversación en redes abiertas, como Twitter, para prever qué es lo que el cliente quiere, para acercar el buscador a la figura de un agente de ventas, un dependiente que ofrece al consumidor lo que desea.

Para entenderlo, Maldonado pone un ejemplo de la interpretación y empatía en el proceso de búsqueda: si un cliente teclea, en pleno diciembre, el término «botas» en el buscador de una tienda de ropa online de Londres, gracias al contexto y al análisis de las redes sociales, gracias a la comprensión del lenguaje del usuario, «entenderá», empatizará con él, y colocará en primer lugar los resultados de las botas de agua.

La baza que juega Colbelson es garantizar conexiones correctas entre los clientes y los datos de la empresa. Y, para ello, la compañía gallega lleva a cabo un análisis que mide el ratio de encontrabilidad, es decir, evalúa objetivamente cómo la gente encuentra los resultados, cuántos clientes desechan la búsqueda y el grado de éxito de las respuestas que proporciona el buscador, para afinar, cada vez más, sus resultados.

Colbenson trabaja ya mano a mano con TXTR para poner en marcha su servicio con la campaña navideña de la librería alemana. «Este acuerdo es una gran noticia para Colbenson, pero, sobre todo, con la que está cayendo, nos sentimos muy satisfechos de vender un producto a los alemanes. Todavía podemos venderle tecnología a Alemania», apunta, orgulloso, Maldonado.