Shannen Doherty planea su funeral y ya hay una larga lista de personas vetadas: «No quiero a esa gente allí»

P. V. LA VOZ

SOCIEDAD

La actriz Shannen Doherty
La actriz Shannen Doherty Bang Showbiz | Reuters

«Hay gente que yo pienso que se presentará porque es lo políticamente correcto y por no quedar mal», ha explicado en su pódcast la actriz de «Sensación de Vivir» y «Embrujadas», que sufre un cáncer de mama con metástasis en el cerebro

19 ene 2024 . Actualizado a las 17:13 h.

La actriz Shannen Doherty, famosa por sus papeles en las series de televisión Sensación de Vivir y Embrujadas, ha revelado que prepara ya su funeral y ha confesado varios detalles: quiere que sea un «festival del amor» y ya avanza que tiene una larga lista de personas vetadas. Ha sido en su propio pódcast Let's be clear with Shannen Doherty donde la intérprete de 52 años, que sufre cáncer de mama en fase avanzada con metástasis en el cerebro, le ha contado sus planes funerarios a su amigo Chris Cortazzo. Y ha revelado que fue cuando iba camino al quirófano el año pasado cuando se dio cuenta de que tenía que dejarlo todo bien atado.

Según le ha manifestado a su colega, Doherty no quiere «que la gente llore» en su despedida final, sino que, por el contrario, quiere convertir el evento en un «festival del amor». De ahí que, para conseguir eso, tiene ya preparada una lista negra de personas que no quiere que acudan. «No quiero gente llorando ni tampoco personas que, en el fondo, estén pensando para sus adentros: “Gracias a dios, por fin se ha muerto”», se permitió bromear durante la conversación.

«Hay un montón de gente que yo pienso que se presentará que yo no quiero allí», ha explicado con rotundidad la actriz, «es que no los quiero allí», reincidió, «y sé perfectamente quiénes son». 

Por eso, en parte porque no quiere que estén allí, y en parte por quitarles a esas personas «esa presión», ha decidido hacer una pequeña lista de las personas que quiere que estén allí.

Doherty lo justifica en que cree que mucha gente solo va a acudir por aparentar. «Las razones por las que esa gente va a acudir no son exactamente las mejores razones, porque es que realmente no les gusto», expresó entre risas, «pero solo lo harán porque es lo políticamente correcto, y por no quedar mal», aunque ella lo tiene claro: «Creo que no les gusto lo suficiente como para que vengan a mi funeral».

En todo caso, tampoco cree que sea nada malo que mucha gente no quiera rendirle ese homenaje. «Sé que tienen sus motivos, cosa que me parece bien», expresó Doherty, «pero es que detesto la falsedad». Y en todos sus aspectos. «No puedo soportar a la gente que dice que de repente encontró a Jesús y que se arrepienten y empiezan a decir que nunca quisieron decir nada malo sobre ti», explica Doherty, seguramente teniendo a alguno de sus archienemigos en mente. «No, yo sé que sigues siendo el mismo ser humano mezquino de antes», concluye la actriz de Sensación de Vivir, «pero no pasa nada, simplemente ignorémonos».

Los dos momentos de su vida que le llevaron a reflexionar sobre su funeral

Durante su pódcast, la intérprete asegura que hay dos momentos que le llevaron a dejar todo bien atado de cara a su funeral. El momento culminante fue en el momento en el que la llevaron a quirófano para una cirugía cerebral el año pasado. «Pensé que no iba a sobrevivir», narra la actriz, y por ello decidió «dejar todo superclaro haciendo el testamento».

El otro momento clave fue el funeral de su propio padre. «Cuando vi quién iba apareciendo en el acto, fue cuando empecé a pensar en quién vendría al mío», comenta.

También ahí, entre lágrimas de despedida a su progenitor, se dio cuenta de que no quería que fuese una acto triste, sino una fiesta. «Yo soy de las que está siempre sollozando en los funerales», confiesa, «pero quiero que en el mío no haya gente llorando, quiero que sea un festival de amor». Y, para que a su amigo le quede clara la idea, le recuerda un evento común: «¿Recuerdas el cumpleaños de mi madre? Pues así».

Quiere ser cremada y revela dónde quiere sus cenizas

La actriz también revela, durante la conversación con su gran amigo, que no quiere ser enterrada, sino cremada. Y, aunque no tiene claro en qué lugar geográfico acaben sus cenizas, sí tiene claro qué quiere que hagan con ellas. «Quiero que las mezclen con las de mi padre y con las de mi perro Bowie».

Una larga enfermedad

La actriz lleva mucho tiempo compartiendo el duro proceso del cáncer de mama con sus seguidores en redes sociales. El pasado mes de junio, la intérprete de Embrujadas revelaba que su situación había empeorado en los últimos meses, ya que habían descubierto que padecía metástasis en el cerebro, en un duro vídeo en el que, con lágrimas en los ojos y acostada sobre una camilla, se la veía recibiendo su primera sesión de radioterapia en el cerebro.

«Mi miedo es evidente», decía Shannen Doherty acerca de su experiencia durante la primera sesión de radioterapia, realizada en enero, «soy extremadamente claustrofóbica y en mi vida estaban pasando muchas cosas», aunque no dejaba de agradecer la gran atención por parte del equipo de doctores que la estaban tratando.