«Este premio pone en valor la acción de los profesores de la escuela pública»

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Orientador en un instituto de Coslada, Juan de Vicente Abad dirige el plan contra el acoso y lidera veinte proyectos de aprendizaje-servicio

21 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Es el mejor. O al menos este año así se lo ha considerado el jurado del premio Docente Innovador, que promueven la Fundación Amancio Ortega y la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre a través de su web educativa, Plataforma Proyecta. Juan de Vicente Abad es un profesor del sistema público español desde hace 26 años, y gracias a la constancia y esfuerzo ha conseguido darle la vuelta a su instituto, un centro «mediano» de 700 alumnos en una ciudad dormitorio del este de Madrid, Coslada, de 80.000 habitantes. También imparte cursos sobre resolución de conflictos a otros profesores.

-Usted es orientador en un IES, profesor de Educación para la Ciudadanía y dirige un programa contra el acoso. ¿Se esperaba ganar entre 213 candidaturas?

-En realidad, no. Pensaba que el premio sería para algún profesor que usase las TIC, así que me agradó que se valorase la innovación hecha por el trabajo en grupo. Además, creo se pone en valor la acción de los profesores de la escuela pública. Recuerda que es un mito que los docentes van a lo justo, porque en el IES Miguel Catalán hemos demostrado que si la idea funciona, los profesores nos implicamos, porque nos encanta hacer las cosas bien. Claro que los grados de implicación no son iguales, pero este es un trabajo en grupo.

-¿Cree que falta el reconocimiento al trabajo silencioso?

-Hay pocos premios que reconozcan todo lo que se hace, y creo que las instituciones deberían estar a la altura.

-Habla siempre de trabajo en grupo. ¿Por qué ese matiz?

-Este premio es para todos. Es cierto que tengo el liderazgo pedagógico del centro, pero lo único que hago es facilitar a los 57 profesores la posibilidad y a los alumnos la estructura que mejor funciona: la participación.

-¿Cómo es la participación de cada uno de los agentes?

-Los alumnos se encargan de evitar que se llegue al acoso, que tenemos que recordar que supone repetición; todos asumen que tienen que involucrarse, porque su silencio ante una injusticia les hace cómplices. Los profesores participan porque toman en serio a los alumnos, que es la referencia para sacar lo mejor de cada uno, hacerles brillar. Pero también es un trabajo de la comunidad. Nosotros tenemos ahora mismo veinte proyectos de aprendizaje-servicio, con los que los alumnos aplican en la sociedad lo que aprenden en clase: acabamos de hacer un maratón de donación de sangre, colaboramos con niños con Asperger, con enfermos mentales... Hacemos bueno el aforismo de que para educar a un niño se necesita toda la tribu.

-Lleva muchos años en la profesión y 16 en el IES de Coslada. ¿Nunca quiso tirar la toalla?

-No. Es cierto que tengo mucha resistencia a la frustración [risas] y al principio pensaba ?cuándo me queme, lo dejo?, pero no ha ocurrido. Me alimento de la energía de mis alumnos, y eso es inagotable: nosotros tenemos como eslogan del centro [IES Miguel Catalán] la fórmula de Einstein, esa de energía es igual a M (Miguel) C (Catalán) al cuadrado.

Por qué destaca

Carrera innovadora

Un galardón de 10.000 euros. Dirige el programa de ayudantes contra el acoso, en el que participan los propios alumnos para detectar conductas problemáticas en el entorno. Y lidera al claustro de 57 profesores a la hora de organizar proyectos de aprendizaje-servicio, que supone completar el conocimiento adquirido en clase con acciones que redunden en la mejora del entorno. Ahora mismo el instituto tiene 20 proyectos en marcha.