Manuel Freire Garabal, catedrático de farmacología de la USC: «La seguridad del ibuprofeno parece ser una cuestión de dosis»

Antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) como el ibuprofeno o el paracetamol se han sentado de nuevo en el banquillo de los acusados. El Comité de Evaluación del Riesgo de Medicamentos de la UE está revisando los efectos adversos que pueden producir algunos de los medicamentos más utilizados en España. Este mes prevé emitir un nuevo juicio sobre las consecuencias de su consumo durante un largo período de tiempo y en cantidades altas. Pero mientras no dicte sentencia, como explica el catedrático de Farmacología de la Universidade de Santiago, Manuel Freire Garabal, «los estudios realizados hasta el momento aportan la evidencia de que solamente la dosis más alta durante tiempo prolongado parece evidenciar posibles efectos tóxicos cardiovasculares. Por el contrario, la posología más baja y tomada durante menos tiempo produce un alivio del dolor y la inflamación sin evidenciar efectos secundarios importantes. La seguridad del ibuprofeno parece ser una cuestión de dosis».

-¿Cómo actúa el ibuprofeno?

-Lo que hace este fármaco es la inhibición de dos enzimas, la COX-1 y la COX-2. La primera facilita la formación de prostaglandinas que ayudan a proteger el aparato digestivo o a facilitar la coagulación. La COX-2 aparece cuando hay inflamación o traumatismos. De ahí que el ibuprofeno, al actuar sobre ambas, afecta a esos procesos protectores, pudiendo producir con un consumo elevado daño gástrico como gastritis o úlceras, alteración del aparato digestivo... Como consecuencia, se buscaron medicamentos que solo afectaran la COX-2.

-Pero ese descubrimiento no resultó tan maravilloso como se esperaba...

-No, porque se detectaron que estos fármacos no estaban exentos de riesgo, porque empezaron a detectarse problemas relacionados con el aparato cardiovascular, problemas de hipertensión o trombosis. Por eso, varios de estos medicamentos que solo afectaban la COX-2 fueron retirados del mercado. Solo se mantienen unos cuantos para pacientes con problemas gástricos. El problema es que la inhibición de la COX-2 puede provocar trombosis e hipertensión que causen trastornos cardiovasculares como ictus o infarto.

-Aunque un medicamento se haya testado y esté en el mercado, no hay que bajar la guardia.

-El proceso para la aprobación de un medicamento es bastante largo, desde que está en desarrollo hasta que pasa por los diferentes estadios de la fase clínica, desde el ensayo en voluntarios sanos a usarlo a pequeña escala en enfermos o ya hacer ensayos a gran escala. Pero una vez que se autoriza y se empieza a comercializar, hay que hacer una vigilancia constante. Cuando se detecta alguna consecuencia extraña debe notificarse rápidamente y se revisan sus efectos. Algunos pueden llegar a incluso prohibirse.

-¿Cual es el gran problema con el ibuprofeno?

-Hay ibuprofeno de 200 y 400 miligramos para los que no hace falta receta. El 600 hace falta que lo prescriba un facultativo. En España hay un abuso de este último. El problema es cuando se consume cada vez que duele algo y no se tiene un control. Cuando anuncian algún fármaco para el que no es preciso receta dicen claramente que se consulte con un profesional. No puede tomarse a la ligera.

-Otro de los medicamentos con riesgo es el paracetamol. ¿Qué efectos puede tener?

- El exceso de paracetamol facilita que se metabolice en el hígado con diez alternativas generando metabolitos tóxicos que pueden dañarlo.

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