Según un informe, la jornada continua en los colegios no se considera adecuada ni para la conciliación, ni para la igualdad de género, ni para atender las necesidades de los menores
23 sep 2013 . Actualizado a las 23:34 h.Los horarios de los colegios no pueden limitarse a la mañana sino que han de tener jornada partida, aunque eso suponga empezar más tarde. Esa es la primera gran clave para conseguir la conciliación familiar y laboral, según la subcomisión del Congreso que ha estudiado el asunto y que ha hecho un informe, conocido ayer por Europa Press. El estudio de la Subcomisión para el Estudio de la Racionalización de Horarios, la Conciliación de la Vida Personal y Laboral -que se debatirá en la Comisión de Igualdad esta misma semana- constata la imposibilidad de una adecuada conciliación con la divergencia entre los horarios laborales y escolares.
Según el trabajo, la jornada continua en los colegios no se considera adecuada ni para la conciliación, ni para la igualdad de género, ni para atender las necesidades de los menores. Se deben «adaptar tanto los horarios, como las vacaciones y el resto del calendario escolar a las jornadas de trabajo». El texto añade que es necesario «un esfuerzo mayor para ajustarlo, y ampliar la oferta de servicios complementarios o extraescolares, como acogida matinal o servicios en vacaciones. Es clave para una adecuada conciliación, al menos en el período que va del nacimiento hasta los doce años, edad en la que el menor tiene autonomía», añade.
Para atender las necesidades de conciliación de la primera infancia, la comisión propone fomentar la creación de guarderías en las empresas y que Hacienda otorgue beneficios a aquellas firmas que amplíen las bajas parentales y la flexibilidad en el trabajo presencial.
Las empresas deberán contar con un plan de igualdad de forma obligatoria, y sería muy beneficioso que se estudie la posibilidad de adaptar y desarrollar la figura del contrato a tiempo parcial.
Un «prime time» adelantado
En paralelo, sigue el informe, estas medidas de organización se deben complementar con otras de índole social, como el hecho de que las televisiones adelanten el prime time, la hora de máxima audiencia; la petición llega justo cuando este otoño las cadenas han decidido atrasar media hora el inicio de sus series estelares. También se alude a la erradicación de los contenidos sexistas y que contribuyan a la perpetuación de estereotipos en el rol de la mujer, fomentando la autoestima y la dignificación de esta.