Medio Ambiente deniega dispersiones de jabalíes en la zona de las marismas de Dodro

Uxía Llópez PADRÓN / LA VOZ

DODRO

UXÍA LÓPEZ

Esgrime la presencia de especies protegidas y los ganaderos ya no saben que hacer para evitar los graves daños en cultivos

07 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Los ganaderos que tienen cultivos de maíz en el municipio de Dodro y que, por esta época, sufren el incesante ataque de los jabalíes, acaban de recibir un nuevo varapalo de la Xunta. La Xefatura Territorial de la Consellería de Medio Ambiente acaba de denegar la solicitud de dispersiones de jabalíes presentada por la granja A Bouciña de Rois, para poder soltar los perros y echar los animales de una zona de las Brañas de Dodro.

De acuerdo con la resolución de Medio Ambiente, los terrenos para los que se solicitan la dispersiones forman parte de la zona cinegética común Marismas de Dodro, en la que, según un informe de la guardería del Servicio de Patrimonio Natural, hay la presencia y la cría de numerosas especies, entre ellas la escribenta de las canaveiras, incluida en el catálogo gallego de especies en peligro de extinción por lo que, según Medio Ambiente, podría verse afectada negativamente por las dispersiones de jabalíes.

Con esta denegación, los ganaderos ya no saben qué hacer para evitar los graves daños de estos animales a sus cosechas, que se repiten año tras año y especialmente en Dodro, donde las brañas son un refugio perfecto para el jabalí. Y al motivo esgrimido por Medio Ambiente para denegar las dispersiones no les convence. Aseguran que antiguamente si había esa especie de pájaro pero, con el paulatino abandono de la zona, esta fue a menos porque es una especie de hierba y no de matorral, que es lo que prolifera en las brañas. También hablan de que «o can do xabaril busca a este animal, non vai ao paxaro», por lo que piden a Medio Ambiente que demuestre la presencia de la escribenta.

También piden una respuesta ya por parte de la consellería, a la que dicen que se hartan de llamar pero que no les da una solución. «Todos os anos estamos igual e ninguén fai nada, nin sequera pagan os danos que ocasionan os xabarís».

Les duelen especialmente los daños por perder el alimento para sus animales, pero también porque dedicaron tiempo y recursos a limpiar fincas que, de no trabajar ellos, estarían totalmente abandonadas. Es el caso, por ejemplo, de la granja A Bouciña de Rois, que puso a producir terrenos que estaban totalmente abandonados desde que sus titulares dejaron de trabajarlos.

Esta granja solicitó esperas, que sí le fueron concedidas, de modo que este fin de semana se celebra la última, pero esta medida no es suficiente para disminuir la población de jabalíes, que los ganaderos consideran muy elevada en Dodro.