Negreira destina 200.000 euros a un paseo fluvial y a pavimentar varias calles
SANTIAGO
El Concello de Negreira pretende paliar el mal estado de algunas vías y calles del municipio con la inyección de 200.000 euros del Plan DTC 93 de la Diputación. De entre los cuatro proyectos presentados, el mayor montante, con 81.127 euros, corresponde a las mejoras en pavimentación e iluminación de las rúas Nelson Mandela, Rosalía de Castro y una parte de la avenida de Vilachán, así como sendas travesías en As Brañas y la avenida de Barcala.
El gobierno local incluye 58.872 euros para el mantenimiento de vías en Logrosa y Barbazán, así como treinta mil euros más para adecentar la pista de Vilacoba al cruce con la vía hacia Farrapa, y una pista en Fornos. El cuarto de los proyectos reserva otros 30.000 euros para ejecutar la ampliación del paseo fluvial por todo el linde con los ríos Barcala y Albariña, del polígono industrial de Cobas. El Concello pretende acometer los trabajos de mejora en los próximos meses.
Suministro de agua
Por otra parte, desde el ejecutivo municipal informaron que los vecinos que quieran engancharse a la red de agua potable que se suministra desde el depósito de A Chanceira, en Aro, pueden solicitarlo en la oficina del servicio municipal de aguas, en horario de mañana.
La puesta en servicio del abastecimiento a los lugares de Gándara, Gonte, Maio Pequeno y Zas, una red que será extendida a otros núcleos como el de Trece, en la parroquia de Liñaio, supone la entrada en funcionamiento de un depósito construido hace más de siete años, pero que nunca llegó a estar operativo.
Su función será la de paliar los problemas de escasez de agua que sufre la zona sobre todo durante los meses de verano, pero también la de garantizar el suministro de agua potable a viviendas de nueva construcción.
Plazos para la nave municipal
Asimismo, el regidor Juan Rey Maceira (PP) señaló que la nave municipal levantada en el polígono industrial podrá estar operativa antes de final de año. Esta semana comenzaron los trabajos para el cierre de las paredes laterales, una tarea que había quedado pendiente de una primera fase debido a lo ajustado de la ayuda aportada por la Consellería de Industria.