Ocurrió el 27 de mayo de 1990
27 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En la década de los ochenta Pontevedra aún tenía un grave problema de abastecimiento de agua y los noventa fueron los años de modernización de la red de suministro, no solo a la capital, sino al resto de municipios de la ría. A la Estación de Bombeo, le siguieron, la planta potabilizadora de Lérez, el colector general de la margen izquierda de la ría y la reconstrucción del embalse y presa del Pontillón de Castro, entre otras grandes obras.
El 27 de mayo de 1990 llegaba al Concello el proyecto encargado al consulting de ingeniería CIISA para la reconstrucción de dicha presa, entonces inservible e inutilizada. Aquella obra supondría un almacenaje de agua de reserva para garantizar el suministro a la población durante al menos seis meses en caso de persistente sequía, además de un importante ahorro energético y la conversión de O Pontillón en un gran parque natural y deportivo.
El Concello puso a prueba se capacidad de gestión para que la Xunta financiara la obra. Costó 560 millones de pesetas y se inauguró en 1993.