Una racha de cinco partidos sin marcar insólita en este siglo y cinco puntos de dieciocho en el 2017

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

14 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En el vestuario granate no se fijan en las rachas, ni positivas ni negativas, prefieren centrarse en el trabajo diario para acabar con la sequía goleadora cuanto antes. Y el equipo ya tiene el partido del próximo domingo en A Malata entre ceja y ceja para ganar y empezar a ver el futuro con mayor optimismo.

Por si acaso, Luisito tira de experiencia personal para espantar cualquier atisbo de ansiedad. «Eu fun dianteiro, e sei que o gol pode chegar en calquera xogada», declara el entrenador convencido de que el gol llegará más pronto que tarde.

Sin embargo, es inevitable que la preocupación cunda entre los aficionados, la mayoría de ellos no recuerdan una sequía goleadora de su equipo tan prolongada. Y es que los granates nunca han pasado, en lo que va de siglo, cinco jornadas consecutivas sin ver puerta. Cuatro semanas en el 2011, temporada del descenso a Tercera División, era hasta el domingo el récord negativo del Pontevedra del siglo XXI. Entre el 15 de enero y el 6 de febrero del 2011, los granates no fueron capaces de anotar ni un tanto ante Montañeros, Badajoz, Rayo B y Castilla. Al quinto intento, rompieron el gafe a domicilio en el campo del Coruxo donde igualaron a un gol.

Cuesta de enero

El mismo escenario en el que el año pasado rompieron los de Luisito una mala racha muy parecida a la que sufre actualmente el Pontevedra.

Los de Luisito iniciaron el año 2016 con una mala dinámica que los llevó a sumar seis puntos en las seis primeras fechas del año después de derrotar al Guijuelo a domicilio, empatar con Burgos, Cacereño y Lealtad y caer en Tudela y, con estrépito, en Santiago.

Este año el bagaje es peor, aunque las sensaciones son más halagüeñas. «O equipo non está morto nin ten nada que ver co da tempada pasada», advierte Luisito. No le falta razón, los granates siguen disponiendo de oportunidades para perforar la meta rival, pero carecen de acierto. Y de dieciocho puntos posibles, llevan cinco, uno menos que en el 2016, pero mantienen la ilusión de defender una cuarta plaza que se labraron a base de goles y mucho trabajo tras una espléndida segunda vuelta. «Só a base de manter o traballo e a ilusión, seguiremos ahí», aseguran.