La fiesta se celebraría el 3 de octubre si reúnen un presupuesto de 10.000 euros
04 sep 2015 . Actualizado a las 05:15 h.La recién fundada Asociación de Hostelería y Turismo de Cuntis trabaja en la organización de la fiesta de la Belle Epoque, después de que el Concello decidiese cancelarla por su alto coste y bajo rigor histórico. Los hosteleros se centran ahora en una campaña de captación de fondos de cuyo éxito dependerá la celebración del festejo el próximo sábado 3 de octubre.
El principal problema al que se enfrentan los hosteleros es la necesidad de reunir un presupuesto de 10.000 euros. Para obtener ese dinero se están planteando diversas posibilidades. La primera de ellas es acudir a «derramas de los asociados o a los bancos», apunta el presidente de la asociación Rubén Navia. Vender abanicos u organizar las fiestas de los clubes deportivos de la villa son otras opciones que podrían ser de gran ayuda.
No obstante, conseguir un donativo de los comerciantes del municipio serviría para dar un gran paso adelante, sostiene el presidente Navia. Hasta el momento solo los pequeños hosteleros y el Balneario están dispuestos a invertir en esta fiesta que atrae al municipio a centenares de personas que durante todo el día consumen en los restaurantes de la villa termal. También los comercios se verían beneficiados de esta actividad extraordinaria, puesto que los participantes de la fiesta elaboran sus propias vestimentas comprando los materiales en el comercio local.
La fecha elegida por los hosteleros para celebrar la fiesta de la Belle Epoque es el sábado 3 de octubre. Unos días más tarde de los habitual para tener un mayor margen de maniobra para la organización y la obtención de fondos, justifican los hosteleros.
Este sector tomará una decisión definitiva sobre la organización de la fiesta en una asamblea que tendrá lugar el 8 de septiembre. La implicación de otros colectivos será clave, aunque no la hostelería no descarta aventurarse en solitario porque «tenemos ganas y es una excusa para que la asociación empiece a funcionar», concluye Rubén Navia.