Pique y luego bromas entre el Rey emérito y la infanta Elena en Sanxenxo

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA

PONTEVEDRA

Ramón Leiro

La hija primogénita de don Juan Carlos compitió con él en una regata. No dejaron de bromear sobre quién ganaba a quién en la ría en medio de un fin de semana «espectacular»

15 jul 2019 . Actualizado a las 14:11 h.

«Fue un fin de semana espectacular». Así resumía esta mañana Pedro Campos, presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, lo ocurrido desde el viernes al domingo en la meca del turismo de sol gallego, donde estuvieron de visita los Reyes eméritos, don Juan Carlos y doña Sofía, y también la infanta Elena.

Campos, anfitrión habitual del Rey emérito, señalaba que fue especialmente entrañable el hecho de que don Juan Carlos y doña Elena compitiesen en distintos barcos en la regata de vela celebrada en la ría.«La verdad es que doña Elena cada vez se está haciendo más aficionada a la vela y eso a su padre le encanta», indicó.

Dijo también que el sábado el barco de la infanta se impuso en la competición. Sin embargo, ayer, fue el de su padre el que se hizo con la victoria y, a la postre, también con el trofeo. «Compitieron muy duro, eso sí, pero luego cuando ganó el padre hubo muchas bromas entre ellos. Tienen los dos un sentido del humor excelente y no dejaron bromear con la competición. Creo que se lo pasaron en grande», indicó Pedro Campos. 

La regata, que tuvo lugar el sábado y el domingo, llegó precedida de una cena en Sanxenxo el viernes, a la que también asistió doña Sofía. En este caso, se trataba de un homenaje a la Armada, que hizo desembarcar para la ocasión al buque Juan Sebastián Elcano en Sanxenxo. Pedro Campos explicó que la presencia del Elcano abrió una enorme caja de recuerdos para el rey don Juan Carlos, que viajó con la memoria a los tiempos en los que él y luego su hijo fueron guardamarinas y pasaron por la Escuela Naval de Marín.

En la cena, en la que se sirvieron viandas como rodaballo o chipirones, se dieron cita numerosos oficiales de la Armada con larga experiencia en Elcano. Sin embargo, y tal y como relataba Pedro Campos, la anécdota de la noche la puso el patrón mayor de la cofradía de pescadores de Sanxenxo, Sauro Martínez, que contó a los presentes que había dado la vuelta al mundo en el buque de la Armada. «Ni yo ni muchos de los presentes lo sabíamos, así que fue muy bonito escucharle contar la historia», señaló Pedro Campos. 

Doña Sofía, que estuvo con el rey y con la infanta en la cena, tuvo agenda propia el sábado. Mientras padre e hija navegaban y competían en la ría de Pontevedra, la Reina emérita se subió a Elcano e hizo la travesía desde Sanxenxo a Marín, donde fue recibida entre aplausos. Según indicó Pedro Campos, la reina se marchó ya el sábado de las Rías Baixas. Mientras, don Juan Carlos y su hija se quedaron hasta ayer en Sanxenxo, cuando al final de la jornada posaron juntos con el trofeo de vela que, eso sí, le pertenecía solo al padre.