«Hoy la crema sabe distinta»

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Niños de colegios públicos de Pontevedra degustan en los comedores un menú especial elaborado por dos cocineros con estrella Michelin

27 nov 2015 . Actualizado a las 08:36 h.

Comida de restaurante en un comedor escolar. El menú que degustaron ayer los niños que son usuarios de los comedores que gestiona la Federación Provincial de ANPA de Centros Públicos de Pontevedra (Fanpa) fue especial. Los dos platos fueron diseñados por dos cocineros con estrella Michelin, Beatriz Sotelo y Xoán Crujeiras, que regentan el restaurante A Estación de Cambre, en A Coruña.

Ni Beatriz ni Xoán, que pertenecen al Grupo Nove, estuvieron ayer físicamente en el comedor del CEIP Praza de Barcelos, donde La Voz realizó este reportaje, pero sí la esencia de su hacer sobre los fogones. A las dos en punto empiezan a llegar los niños. Los primeros son los más pequeños, los de infantil. En la puerta se va pasando lista para saber si falta alguno. Huele a comida y en la mesa central, personal de Serunión, la empresa adjudicataria, está emplatando ya el primer plato. Una crema de judías verdes con ajada gallega.

Olalla De Favorecido, coordinadora de los comedores, comenta que antes de la comida de hoy se hicieron unos talleres previos y durante el mes de octubre Beatriz y Xoán formaron a los cocineros de la empresa. En esos talleres previos los niños aprendieron lo que es un chef, desvelaron quién cocina en sus casas, conocieron de cerca el proceso y el trabajo que hay detrás de un plato, además de adentrarse en el sentido del gusto.

«Vienen a comer, pero también educamos», remacha Olalla, que explica que normalmente los niños se sientan en el mismo sitio con sus amigos y vigila la mesa el mismo monitor. Julieta, una de las pequeñas, no come. A su lado, Noa y Guillermo no sueltan la cuchara. ¿Os gusta? «Sí, hoy es diferente, tiene dos colores, verde y amarillo». Una cuidadora le aclara a Julieta que si remueve los dos colores se quedan en uno. Parece convencida.

Hugo Ferreiro, que quiere que aparezca su apellido «porque hay otros Hugos», Rubén y Marta también están satisfechos con la crema de judías verdes con ajada gallega. «Hoy la crema sabe distinta», dicen. Aunque Rubén pensó que era kétchup. El objetivo de la jornada especial es poner en valor la gastronomía gallega.

Los propios niños se levantan y recogen su plato. Todo se hace de forma bastante ordenada en un local no muy grande y donde lo peor es la acústica. «Queremos que sean autónomos y que aprendan a recoger», explica Olalla. El segundo plato está listo para llevárselo a la mesa. Lomo de cerdo braseado en salsa de naranja y castañas con patatas panadera como guarnición. Lucía Ferreiro está encantada con el menú: «Sabe muchísimo mejor y por una vez hay patatas fritas». A Alexandre también le gustan las patatas, aunque son «muy raras».