Un accidente laboral ocurrido el día 9 de marzo del 2012 en las instalaciones de Allarluz, en el polígono do Chorente, en Allariz, ha traído como consecuencia una condena al director técnico y responsable de la instalación. Juan Antonio Rivero aceptó la condena, por un delito de imprudencia con resultado de lesiones, en concurso con un delito conta los derechos de los trabajadores.
La condena se ha concretado en tres meses de prisión, inhabilitación para el desempeño de labores de supervisión en materia de seguridad en el ámbito de la energía eléctrica, con 540 euros de multa. La pena de prisión se ha sustituido por 540 euros más.
El suceso que da lugar a esta condena ocurrió a raíz de la intervención de un trabajador, de 52 años, cuando efectuaba una operación para reparar un fallo en una máquina retrituradora de la fábrica de biomasa de Allariz. El operario, siguiendo «indicaciones expresas» del acusado, utilizó una escalera portátil extensible que carecía zapatas antideslizantes. Tampoco empleaba equipos individuales anticaída u otra medida de protección.
Desde una escalera
La escalera resbaló y el trabajador, como consecuencia de la caída, sufrió el trabajador fractura del calcáneo y lesión en el peroné. El herido precisó diez días de hospitalización y estuvo incapacitado para sus ocupaciones durante 225 días.