A la cárcel por no pagar una pena de multa de 2.000 euros

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

El impago de cuotas lleva a prisión a ourensanos por pequeñas sumas

03 nov 2013 . Actualizado a las 07:20 h.

«Debo condenar y condeno a D. a la pena de 18 meses de multa con cuota diaria de 3 euros, lo que supone un total de 1.623 euros. En caso de impago, cumplirá un día de privación de libertad por cada dos cuotas de multa no satisfecha». Con términos similares acaban muchas sentencias penales sus fallos condenatorios. La pena de multa económica es una alternativa para algunos delitos que sustituye a las penas de prisión si estas son inferiores a dos años en ciertos casos o a un año, de modo general.

Pero en ocasiones, muchas según algunos abogados consultados, esta medida alternativa acaba siendo a la postre un riesgo real de tener que entrar finalmente en prisión por haber incumplido el pago de las cuotas de la multa. A veces por cantidades pequeñas, de poco más de mil euros, algunos acusados se ven con la amenaza de la cárcel en ciernes.

Una abogada, que prefiere que no aparezca su nombre, relata varios casos que ha conocido. Uno de sus clientes, por no afrontar una multa de 2.300 euros, está cumpliendo 23 meses de prisión. La letrada presentó un recurso para que le sustituyeran la pena por trabajos, pero él no los cumplió. En otro caso, la multa era incluso inferior, 360 euros derivados de una condena por superar la tasa de alcoholemia. In extremis, la letrada consiguió que el joven -que había ingresado en prisión por otra causa- pudiera sustituir la pena del delito de tráfico por trabajos y no prolongar su estancia en el penal.

La actuación de los abogados evita que el mal mayor llegue a producirse, aunque tienen que moverse para presentar escritos, recursos, a veces ya a última hora, e incluso solicitudes de indulto para ganar tiempo y que el cliente pueda juntar la suma estipulada. En ocasiones, los afectados alegan que no tienen dinero para pagar, pues aunque sean cantidades no muy altas a veces los acusados solo ingresan pequeñas pensiones o no quieren pedir más prestado a familiares, una situación que ha vivido con clientes ourensanos recientemente esta letrada. También alude esta abogada a problemas de fondo, como el alcoholismo u otras dependencias que derivan en estilos de vida desordenados, para desatender los requerimientos del juzgado.

Si en estos casos influye más la falta de dinero o otras causas no está claro. El letrado Eduardo Mazaira indica que «mucha gente no puede pagar, pero otra gente lleva una vida irresponsable, no son consecuentes o se olvidan los papeles».

No obstante, el decano de los abogados de Ourense, Arturo González Estévez cree que son «excepcionales» los casos de personas que llegan a ingresar en prisión por este motivo. «En el juzgado son comprensivos y se dan plazos. Siempre se consigue arreglar de una manera o de otra», dice. Sustituir la pena de multa por trabajos en beneficio de la comunidad o por días de localización (para faltas) son otras alternativas que frecuentemente conceden los juzgados como medida diferente a la cárcel, pero siempre que el condenado no se enrede en nuevos incumplimientos de condena.

La ley no permite que una persona vaya a la cárcel por tener deudas, pero una multa económica es una pena. Y debe ser cumplida, a no ser que se solicite su suspensión, otro camino para evitar entrar en prisión. El fiscal informará sobre esta petición de suspensión de condena, pero teniendo en cuenta, entre otros criterios, que el acusado no tengan antecedentes penales. «La cuantía de la multa sí se fija por criterios económicos. La suspensión de la condena, no», explicó uno de los representantes de la Fiscalía de Ourense.

crónica consecuencias de las condenas

«En el juzgado son comprensivos y se dan plazos. Se consigue arreglar de una manera u otra»

Arturo Estévez

«Mucha gente no puede pagar, pero otros no son consecuentes o se olvidan los papeles»

Eduardo Mazaira