El ladrón del Códice Calixtino pudo hurtar 250.000 euros de los cepillos en un año

x. melchor / e. clemente SANTIAGO, MADRID / LA VOZ

CULTURA

Un amago de registro en el edificio Magdalena, de O Milladoiro, congregó ayer a numerosos curiosos y medios informativos.
Un amago de registro en el edificio Magdalena, de O Milladoiro, congregó ayer a numerosos curiosos y medios informativos. álvaro ballesteros< / span>

Manuel Fernández Castiñeiras robó durante veinte años de la catedral un botín diario que podría rondar los 200 euros en metálico

07 jul 2012 . Actualizado a las 03:27 h.

Las primeras conclusiones de la investigación apuntan a que el presunto ladrón del Códice Calixtino, Manuel Fernández Castiñeiras, reunió grandes sumas de dinero -le han intervenido 1,2 millones de euros- robando sistemáticamente durante 20 años los cepillos de la catedral. Por eso había dólares y otras monedas extranjeras y también por eso la mayoría de los billetes de la divisa norteamericana son de un dólar, un donativo clásico entre muchos turistas foráneos.

Las visitas diarias a la catedral del electricista tendrían pues más la intención de cometer los hurtos que oír misa y los investigadores apuntan a que su botín diario podría rondar los 200 euros en metálico; tan solo en el año jacobeo del 2004 habría robado 250.000 euros. Paralelamente, también habría ido sustrayendo los libros antiguos y otros objetos de la catedral que se le han encontrado en los registros.

No vendía lo robado

La policía cree, por tanto, que el acusado no vendía los objetos que se llevó a lo largo de los años de la basílica, aunque este es un extremo que no se ha dejado de investigar. Además del dinero que se le ha encontrado, ahora se sabe que Manuel Fernández Castiñeiras tuvo más en su poder. Grandes sumas con las que pagó a tocateja en el 2008 un ático en A Lanzada (A Revolta-Sanxenxo) y, entre ocho y diez años antes, un piso en O Milladoiro que regaló a su hijo y que está situado justo frente al que habita el acusado con su mujer.