La confederación limpia los cauces de ocho ríos en el sur de Lugo y A Terra Chá

La Voz MONFORTE / LA VOZ

CHANTADA

El río Asma, a su paso por Chantada, en una imagen de archivo
El río Asma, a su paso por Chantada, en una imagen de archivo ROI FERNANDEZ

Una de las actuaciones de mayor calado se lleva a cabo en el tramo urbano del Asma en Chantada

22 oct 2023 . Actualizado a las 19:37 h.

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil reforzó con la incorporación de dos brigadas las tareas de limpieza de cauces que se llevan a cabo en ríos de la provincia de Lugo antes de las crecidas invernales. Los trabajos se llevan a cabo en los municipios de Monforte de Lemos, Sarria, Chantada, Taboada, Castro de Rei, O Corgo, Cospeito y Triacastela, en los ríos Arroxo, Sarria, Asma, Moreda, Ferreira, Tórdea, Anllo y Oribio, respectivamente.

Según estimaciones de la confederación hidrográfica, cuando finalice el presente ejercicio los trabajos de limpieza y conservación de cauces superarán una inversión 1,2 millones de euros. El objetivo general de estas actuaciones, detalla este organismo estatal, es garantizar la continuidad fluvial de los cauces mediante «trabajos de desbroce selectivo de matorral perimetral, poda y clareo de ramas bajas y corta sanitaria de pies secos para evitar tapones en las infraestructuras de paso».

 En zonas que así lo requieren, se procede a la estabilización de márgenes y lucha contra especies invasoras que puedan afectar al estado de las masas de agua, así como a la retirada de residuos sólidos urbanos presentes, sobre todo, en tramos urbanos.

Una de las actuaciones se desarrolla en el río Asma a su paso por el núcleo urbano de Chantada, donde el curso fluvial presenta una alteración morfológica del cauce «con formación de islas artificiales y vegetación en medio del río en un Área de Riesgo Potencial Significativo de Inundaciones (ARPSI)». La intervención ahora en curso, indican desde la confederación hidrográfica, «mejorará la capacidad hidráulica del cauce y la composición de la vegetación de ribera, a través de la retirada de los tapones aislados y a la redistribución de sedimentos hacia las márgenes».

«Estos trabajos son la clave para mejorar la capacidad de desagüe del río y evitar daños a las personas y sus bienes en momentos de intenso caudal», señala José Antonio Quiroga, presidente de la CHMS. Aunque este organismo se compromete a colaborar «con los Ayuntamientos y colectivos vecinales que solicitan y justifican la necesidad de cualquier actuación urgente», recuerda que  el mantenimiento de todo curso fluvial que discurre por zona urbana «es responsabilidad de la Administración competente en materia de ordenación del territorio y urbanismo».