La oposición proeuropea de Georgia se moviliza contra la ley prorrusa de agentes extranjeros

La Voz REDACCIÓN

INTERNACIONAL

Protesta proeuropea en Tiflis la noche del sábado.
Protesta proeuropea en Tiflis la noche del sábado. Irakli Gedenidze | REUTERS

A la multitudinaria protesta del sábado le sigue este domingo una acampada noctura frente al Parlamento contra la normativa, similar a la empleada por el Kremlin para acallar a la disidencia

12 may 2024 . Actualizado a las 18:15 h.

El primer ministro georgiano, Irakli Kobajidze, defendió este domingo la polémica ley de agentes extranjerossimilar a la aprobada por el Kremlin para acallar a la disidencia, a pesar de las  protestas que se suceden diariamente en Tiflis desde mediados de abril, y anunció su aprobación este semana en el Parlamento.

La noche del sábado miles de personas volvieron a salir a las calles de Tíflis, para protestar contra la ley, y este domingo, a partir de las 22.00 horas, está convocada una acampada nocturna frente al Parlamento, informa el portal NewsGeorgia. «No podemos aceptar esta ley rusa. Mañana [por hoy] tenemos que ser multitud, reunirnos en nuestro lugar sagrado, antirruso, frente al Parlamento, y pasar la noche allí por el bien de Georgia», declaró el escritor Lasha Bugadze desde el escenario de la plaza de Europa.

Para la oposición, el proyecto de ley replica en Georgia un sistema que ya se utiliza en Rusia y que se ha convertido en herramienta de represión contra la disidencia, si bien el Gobierno justifica que se trata de una mera cuestión de transparencia, sin trasfondo político alguno, como explicó el sábado Maka Botchorishvili, diputada del partido gobernante Sueño Georgiano y presidenta del Comité para la Integración Europea.

«Existen en Georgia unas 20.000 organizaciones que son parte de la vida política del país y precisamente la Unión Europea nos recomienda mejoras en lo que se refiere al desarrollo de la sociedad civil. Es un factor que necesita transparencia», ha explicado en comentarios al portal Georgia Today.

La llamada Marcha por Europa ha sido el prolegómeno de una serie de renovadas concentraciones frente al Parlamento georgiano en vísperas del inicio de la tercera lectura final de la legislación, que tendrá lugar este lunes. Tras los debates, la controvertida iniciativa se someterá a votación en el pleno, algo que podría tener lugar el próximo martes como muy pronto. Después tendría que superar el veto de la presidenta georgiana, Salomé Zurabishvili.

La presidenta Zurabishvili reiteró este domingo que vetará la controvertida ley, pese a que el Ejecutivo cuenta con el apoyo de la mayoría parlamentaria para sacarla adelante. No obstante, Zurabishvili llamó al Gobierno a revocar la legislación o al menos posponer su tercera y definitiva lectura hasta noviembre, pasadas las elecciones parlamentarias en el país.

«El pueblo de Georgia no permitirá que su futuro europeo esté en entredicho», dijo en alusión a las críticas a la ley, que la oposición y Occidente ven inspirada por las políticas de Moscú. También el embajador de la UE en Georgia, Pawel Herczynski, advirtió de que «si esa ley se aprueba en su forma actual, se convertirá en un serio obstáculo para la integración europea de Georgia».