Merkel y sus socios aparcan sus discrepancias en inmigración para resistir su último año en el Gobierno

La Voz LA VOZ / REDACCIÓN

INTERNACIONAL

WOLFGANG KUMM | AFP

La reunión entre la canciller, el presidente de la Unión Social Cristian y el del Partido Socialdemócrata se centró en el nuevo impuesto de sucesiones, la equiparación salarial y las jubilaciones

12 sep 2016 . Actualizado a las 07:25 h.

La política de refugiados ha quedado aparcada en la hoja de ruta que la canciller alemana, Angela Merkel, y sus socios de Gobierno acordaron ayer con el objetivo de superar las diferencias que han ido creciendo en su último año de gestión. La división interna ha abierto una grieta dentro de las filas conservadoras de la mandataria, cuyos integrantes celebraron una reunión de dos horas en la sede de la cancillería en Berlín. Merkel, el presidente de la Unión Social Cristiana, Horst Seehofer, y el del Partido Socialdemócrata, Sigmar Gabriel se encerraron en la sala con un objetivo: resolver en las próximas semanas los puntos que les alejan en los proyectos más importantes para el pais, entre los que se incluyen el nuevo impuesto de sucesiones, la equiparación salarial de hombres y mujeres y de las jubilaciones en el oeste y el este del país.

La gestión de la crisis de refugiados, la manzana de la discordia que ha convertido a Seehofer en el mayor crítico de su socia conservadora, brilló por su ausencia en las conversaciones. Poco antes de que se celebrase el encuentro, el primer ministro de Baviera criticó abiertamente la política de refugiados de Merkel, después de que los populistas de derechas de Alternativa para Alemania encadenaran un nuevo triunfo electoral con su discurso antiinmigración y superasen por primera vez a la CDU de la canciller en una región.

Seehofer pudo tratar este tema personalmente en privado con Merkel, con quien mantuvo una conversación a solas de más de dos horas. Pero, a pesar de que ambos líderes enviaron señales de querer recuperar la armonía, parece que no hubo acercamiento y la canciller desoyó las demandas de Seehofer de limitar el número de refugiados

Límites a los refugiados

«La Unión sólo saldrá del modo perdedor cuando demos una respuesta clara de cómo queremos limitar la inmigración», dijo Seehofer en declaraciones que publicó el dominical Bild am Sonntag. «Con buena voluntad nos pondremos de acuerdo también en estas cuestiones controvertidas».

Las reacciones en torno a estas diferencias no se han hecho esperar: el secretario general de la CDU de Merkel, Peter Tauber, advirtió a los aliados bávaros del peligro de magnificar las diferencias. «Deberíamos evitar dar la impresión de que tenemos visiones completamente contrarias», dijo al dominical Welt am Sonntag. Por su parte, el vicepresidente de la CDU Thomas Strobl aseguró que era «imprudente» hacer como si las medidas adoptadas hasta ahora no estuvieran surtiendo efecto. «No hay nada más perjudicial para la CDU y la CSU que pelearse entre sí», añadió.

Los socios de la Gran Coalición quedaron en reunirse nuevamente a principios de octubre para tomar decisiones. Sin embargo, la mayoría de los proyectos precisan del visto bueno de la Cámara Alta, en la que están representadas las 16 regiones del país.