Arabia moviliza 30.000 soldados para blindar la frontera con Irak

Laura Fernández Palomo AMÁN / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El presidente kurdo solicitó a su Parlamento el referendo de independencia

04 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La difusión de varios vídeos que mostraban cómo soldados iraquíes se retiraran de la frontera con Arabia Saudí ha activado la alarma. El reino petrolero ha desplegado 30.000 efectivos en los 800 kilómetros de divisoria alertado por el avance del Estado Islámico (EI). Según los protagonistas del vídeo, habrían recibido la orden de retirarse, información que ha negado el portavoz militar de Irak, Qasem Ata, quien asegura que la linde está protegida. Lo cierto es que el grupo yihadista lleva semanas amenazando con extender su control a los países vecinos de Jordania y Arabia Saudí.

Irak vive sumido en un caos entre una insurgencia suní que lucha contra el primer ministro Nuri al Maliki y el extremista EI, que, con sus atroces métodos, utiliza el terror para abrirse paso en territorio iraquí, como ya lo hiciera en Siria. Pero los dos tienen como objetivo dominar Bagdad, para lo que EI asegura que cuenta con medio millar de suicidas, árabes y occidentales, esperando para entrar en la capital, según declaró uno de sus miembros al diario marroquí Ajbar al Yawm.

De los secuestrados, una de sus técnicas más habituales para financiarse, la milicia radical liberó ayer a los 32 camioneros turcos que tenía retenidos, aunque todavía mantiene cautivos a otros 49 ciudadanos que raptó en su entrada en el consulado turco de Mosul.

Mientras, la provincia del Kurdistán permanece en una relativa calma, controlada por las fuerzas kurdas; al igual que la disputada ciudad petrolera de Kirkuk, que gestionan desde la espantada del Ejército iraquí y que ahora han conseguido integrar de facto en su región autónoma. Esta situación ha motivado que sus dirigentes, al margen de la ofensiva que vive el país, presionen para formalizar su deseada independencia. El presidente del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, pidió ayer al Parlamento de la región autónoma organizar el referendo de independencia: «Esto reforzaría nuestra posición y será un arma potente a nuestro favor», argumentó.

La situación empeora

En el resto del país, las tropas iraquíes en su intento por parar la ofensiva mataron al menos a siete extremistas en la provincia occidental de Al Anbar y a otros siete en la de Babel; además de ocho insurgentes que fueron abatidos y otros seis capturados en la zona de Sharwin. Ante el caos, EE.UU. y Arabia Saudí insisten en la necesidad de crear un Gobierno de reconciliación para terminar con la violencia que impera en el país.

Cáritas, que ha activado un programa de emergencia en el país, asegura que la situación en Irak «empeora dramáticamente» con centenares de muertos y miles de desplazados que huyen de la violencia yihadista. Según cálculos de la organización, 15.000 familias escaparon de Qaraqosh, ciudad de mayoría cristiana.