Hollande, recibido como un héroe en la liberada Tombuctú

H. Asquin / L. Boutreux TOMBUCTÚ / AFP

INTERNACIONAL

JOE PENNEY

El presidente dice que seguirá en Mali hasta acabar con los terroristas

03 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El presidente François Hollande fue recibido ayer como un héroe por los habitantes de Tombuctú, la emblemática ciudad del norte de Mali liberada por tropas francesas y malienses tras diez meses en manos de grupos islamistas vinculados a Al Qaida, que impusieron la sharia (ley islámica) a la población.

Hollande, acompañado por tres de sus ministros y el presidente del país Dioncounda Traoré, visitó una histórica mezquita y el centro de la ciudad, donde se conservan valiosos manuscrito, aunque una parte fueron quemados por los islamistas. Entre 2.000 y 3.000 personas se congregaron para «decir gracias» a Francia en la principal plaza al son de los tambores, prohibido por los islamistas, igual que cualquier tipo de música, durante su ocupación.

«Las mujeres de Tombuctú, damos las gracias infinitamente a François Hollande. Ha cortado el árbol, ahora solo queda arrancarlo de raíz», afirmó Fanta Diarra Touré, de 53 años, una exrecepcionista que llevaba un chal con los colores de la bandera francesa. La mujer exhortó al Ejército francés «a quedarse al menos cinco meses para buscar a esa gente», los islamistas que huyeron de la ciudad sin luchar.

Hollande afirmó que la intervención militar contra los salafistas aún no se ha completado. «Los combates no han terminado (...), pero nuestro objetivo es pasar el bastón de mando» a las fuerzas africanas, afirmó.

El presidente dio por terminada la primera misión de la intervención militar, pero recalcó que queda trabajo por hacer.

«El terrorismo ha sido repelido, expulsado, pero aún no vencido», dijo horas después en la capital, Bamako, reafirmando que Francia seguirá en Mali «el tiempo necesario». «Cuando Francia fue atacada (...) ¿quién vino entonces? Fue África, fue Malí. Gracias, gracias. Hoy pagamos nuestra deuda», dijo en referencia a los africanos que combatieron con uniforme francés en las dos guerras mundiales, Indochina y Argelia. Queda por ver cuánto durará la luna de miel entre Francia y Mali.