Dos grupos de amigos, uno inglés y otro gallego, se visitan cada año, jugando un partido entre ellos y viendo otro en el país de destino que este año, por primera vez, será el Celta-Deportivo
22 oct 2016 . Actualizado a las 21:11 h.La conexión más obvia Celta-Sheffield puede parecer a día de hoy la reciente cesión de Álex López a uno de los equipos de la ciudad el curso pasado. Sin embargo, hay otra que viene de mucho más lejos y que es la que forman los Redcoats y Os Porcos bravos, dos grupos de amigos, uno inglés y otro gallego, que cada año visitan al otro para jugar un partido de fútbol y para ver uno de algún equipo de la otra tierra. En el caso de Galicia, siempre han elegido el Celta contagiados por la afición que predomina en los Porcos. En esta ocasión, estarán en el derbi.
Todo empezó hace diez años. «En un pub, como comienzan todas las cosas en el fútbol moderno», ironiza al impulsor gallego, el vigués residente en Pontevedra Fran Méndez. Él tenía un amigo inglés que vino a celebrar su despedida de soltero a Galicia e hizo lo propio cuando le tocó pasar por la vicaria ese mismo año. Cada uno de los dos acontecimientos llevó aparejado un partidillo de fútbol entre el grupo de amigos de uno y otro que fue le origen de la iniciativa actual. «Estábamos en un pub lamentando que todo acabara y decidimos que no, que podíamos continuar. Así creamos lo que llamamos la Anglogalician Cup y en ese local hay una placa en inglés y gallego que lo conmemora para que lo pueda ver todo el mundo, presume».
El humor y la diversión presiden un proyecto donde hacer el mejor papel posible en sus duelos -ya sean de fútbol, fútbol sala o fútbol 7, según la ocasión- también es prioritario. La táctica clave para ganar retrata su espíritu: «Parte del proceso es salir por la noche y destrozar al otro equipo la noche anterior», revela entre risas. Normalmente juegan el domingo, pero en este caso está reservado para el partido. «Va a ser su primer derbi. Todos van con el Celta». Pese a ello, en ocasiones anteriores tuvieron algún que otro encontronazo en Vigo. «Ven a 20 tíos calle abajo de blanquiazul y de piensan que son del Deportivo. ¡Pero es que vienen con camisetas del Sheffield Wednesday con los mismos colores!».
Como pero señalan que nunca han logrado la colaboración del Celta. «Siempre intento hablar con alguien del club para comentarle la iniciativa, pero no hay manera», lamenta Méndez. Eso contrasta con el gran trato que les han dado los clubes de allí, con recepciones y dejándoles visitar sus instalaciones, aparte de las entradas gratis. «Estas del derbi las costeamos nosotros. No tenemos ninguna subvención. Y eso que un año Estrella Galicia sí que nos las pagó, pero por parte del Celta nada de nada. Como dice un amigo mío, menos detalles que el salpicadero de un panda».
Pese a las dificultades -les lleva prácticamente un año organizar cada viaje-, siguen adelante. Cada grupo tiene unos 40 integrantes -en el gallego los hay de Pontevedra, Vigo, Bueu, Ferrol o A Coruña, entre otros-, y aunque se les ha querido sumar más gente para aprovechar el viaje, sus reglas no permiten que cualquiera se adhiera sin más. «Se nos ofreció gente, pero todo se articula a través de amigos, nos autorregulamos». El propio Fran les bautizó: «Hubo un tiempo que iba mjucho al Ribeiro y caminando por allí una señora mayor siempre me repetía: ‘Coidado, rapaz, que aquí hai moito porco bravo’. A la octava vez le dije que un día tendría un equipo de algo y le llamaría así». Cumplió y el domingo los Porcos Bravos estarán en Balaídos con los Readcoats. Una manera diferente de vivir el derbi. Y unos cuantos celtistas más en la grada.