Un informe de la empresa concesionaria recoge que el hongo está remitiendo
29 oct 2015 . Actualizado a las 19:58 h.El estado del césped de Balaídos ha abierto la caja de los truenos. Si el sábado era Eduardo Berizzo el que cargaba contra el estado del terreno de juego, y el lunes era el presidente, Carlos Mouriño, el que comentaba en un programa de radio que el correcto estado de la hierba no era un lujo, sino una necesidad, ayer era el Concello el que salía al paso de las críticas.
Lo hizo recurriendo a un informe elaborado por la empresa Althenia, que actualmente tiene la concesión para el mantenimiento del césped del estadio municipal. Según dicha memoria, la hierba se encuentra «en condicións aceptables», puesto que «só un 4 % do céspede está afectado por un fungo». Además, reza el comunicado del Concello, este ya está siendo tratado de forma exitosa, puesto que los técnicos de la concesionaria han constatado que la infección fúngica está remitiendo.
Más allá de la plaga de hongos que tiene en jaque al campo, el informe de la empresa concesionaria también se pronuncia sobre el pobre aspecto que presentaba la hierba en el partido ante el Real Madrid -concretamente, tenía un tono amarillento, ondulado y el balón rodaba de manera extraña-. Según sostiene el informe, «a estética do terreo de xogo -sen afectar á funcionalidade- non foi a desexada no último partido debido a que os operarios realizaron unha baixada na sega de 2 milímetros, a petición dun técnico do Celta». Según aclara el comunicado, eso se tradujo en rebajar un 15 % adicional la siega que se realiza habitualmente antes de cada encuentro.
Una historia que viene de largo
El estado del césped de Balaídos trae de cabeza al Celta desde hace tiempo, aunque no ha sido hasta ahora cuando han alzado la voz. El pasado mes de agosto Eduardo Berizzo ya dio la alarma al ver síntomas preocupantes en el césped que podían afectar de lleno a su equipo, cuyo fútbol pasa por bajar el balón e imprimirle un ritmo vertiginoso. Tras el toque de atención del Toto, el campo mejoró en las primeras citas ligueras, pero desde entonces el césped ha ido deteriorándose poco a poco por falta de cuidados sin que el club pudiese hacer nada, puesto que Balaídos es de titularidad municipal y el Celta no puede hacerse cargo de su mantenimiento.
En el trasfondo del mal estado del césped de Balaídos se encuentran los cambios en la concesión del servicio de mantenimiento. De Cespa pasó a manos de la empresa Aníbal Soto, con quien tuvo discrepancias el entonces ingeniero agrónomo de la instalación, José Manuel Calderón, y ahora es la empresa Althenia la que está al frente de los cuidados del terreno de juego.
Las declaraciones de Berizzo el sábado asegurando que «el estado del campo es deplorable y contraproducente para todos. Está malo, contaminado», abrieron el melón, y Mouriño, en el programa El Larguero, echó más leña al fuego asegurando que durante cuatro días nadie de la empresa había ido a cuidar el césped, y que, cuando, tras insistirles, lo hicieron, les decían que no disponían de material para los cuidados. Ahora, con los focos puestos sobre Balaídos, habrá que esperar para ver si el campo se recuperar y reverdece, o si Balaídos será un enemigo para el Celta.