Al Bano y Romina, de nuevo juntos

Rafael M. Mañueco COLPISA

GENTE

Acaramelada y como si nada hubiera pasado, la mítica pareja regresó ayer a los escenarios en Moscú tras veinte años de separación e insultos

17 oct 2013 . Actualizado a las 23:57 h.

Los pijos moscovitas y los nuevos ricos de Rusia que en los 70 y 80 eran unos adolescentes no querían perderse uno de los reencuentros más esperados de las últimas décadas, el de una pareja que arrasó en lo musical pero que en lo personal protagonizó una de las separaciones más vergonzantes y humillantes de la historia. En medio de un griterío ensordecedor, Al Bano y Romina Power salieron ayer de nuevo juntos a un escenario para cantar sus grandes éxitos: Felicita, Ci Sara, Liberta, Sharazan... Temas que deleitaron a los rusos en las discotecas soviéticas y a la juventud de medio mundo

Se mostraron tan acaramelados como en sus momentos de gloria. En la inmensa sala del Crocus parecía que nada hubiera pasado y que las heridas que ambos se han ocasionado estos últimos años en la prensa rosa hubieran cicatrizado. Pero él ya había advertido antes de llegar a Moscú que «el pasado ya no puede regresar» y que este reencuentro artístico durará solo estos dos días de conciertos en Rusia. Los organizadores han presentado el recital como la celebración de los 70 años que Al Bano cumplió en mayo. Romina, hija del legendario Tyrone Power, tiene 62. Junto al inolvidable dúo, ayer actuaron y lo harán otra vez hoy Toto Cutugno, Umberto Tozzi, Gianni Morandi, Pupo, Riccardo Fogli, Ricchi e Poveri, Matia Bazar y Boy George.

La relación entre Al Bano y Romina se truncó en 1994, tras la misteriosa desaparición en Nueva Orleans de la hija mayor de la pareja, Ylenia Carrisi. Llevaban entonces 24 años casados. El divorcio se consumó en 1999 y, partir de ahí, se declararon la guerra. Utilizaron las revistas del corazón para zaherirse mutuamente con acusaciones cruzadas y todo tipo de insultos.

Al Bano sigue pensando que fueron las drogas las que malograron su matrimonio con Romina y que ésta las tomaba junto con Ylenia. La discrepancia más clamorosa que los dos continúan manteniendo es su actitud en relación con la búsqueda de la hija. Él cree que todo está perdido y no queda esperanza, mientras ella está convencida de que Ylenia vive en alguna parte del mundo. El cantante insistió en enterrar el hacha de guerra hace unos meses para unirse de nuevo, aunque sea por dos días, para supuestamente contentar a los fans y a sus tres hijos. Que el reencuentro musical haya tenido lugar en Moscú no es casual. El dúo dice amar al público ruso, al que conoce ya de otras veces, y el afecto es mutuo, ya que no hay canción que más se aprecie en Rusia que la italiana. La mayor parte de los temas interpretados ayer fueron coreados por los asistentes a la gala. Lo que han cobrado Al Bano y Romina por esta fugaz reaparición pública se mantiene en secreto.