El informe forense expone que en el momento de su hallazgo el cuerpo se encontraba totalmente desnudo y escondido entre unos matorrales y presentaba una fractura de mandíbula y varias en la cabeza y el tórax
31 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La autopsia que los profesionales del Instituto de Medicina Legal de Ponferrada realizaron a la peregrina Denise Pikka Thiem, cuyo cuerpo apareció el 12 de septiembre, meses después de su desaparición, concluye que la mujer sufrió al menos seis fracturas en el brutal ataque que acabó con su vida, tal como publicaba ayer el periódico Diario de León en una información firmada por M. Á. Zamora y A. G. Valencia.
Según este medio, el informe forense expone que en el momento de su hallazgo el cuerpo se encontraba totalmente desnudo y escondido entre unos matorrales y presentaba una fractura de mandíbula con pérdida de piezas dentales, y varias fracturas en la cabeza y en el tórax. Tenía el cabello enredado con sangre, palos y barro. El cuerpo se encontraba boca abajo con la cabeza girada hacia la izquierda, las piernas flexionadas y los brazos pegados bajo el cuerpo. No tenía manos y, sobre esta circunstancia, «no puede descartarse que fuera por la acción de animales carroñeros ni la amputación traumática postmortem», dice la autopsia.
Los autores del informe calculan que la muerte de la peregrina estadounidense, que se encontraba realizando el Camino de Santiago cuando desapareció tras haber dejado Astorga, se había producido entre un mes y ocho meses antes de la aparición de sus restos. Además, del análisis del cuerpo realizado por los forenses se desprende que el cadáver fue trasladado en las horas inmediatamente posteriores a su muerte.
Por esos hechos fue detenido, el mismo día en el que apareció el cadáver, Miguel Ángel Muñoz Blas, que se confesó autor de los mismos y que se encuentra en prisión preventiva en el centro penitenciario de Villahierro. Su versión contrasta con las conclusiones de la autopsia, puesto que reconoció haber propinado un golpe con un palo a la víctima y que esta habría muerto al caer y golpearse contra una piedra, un escenario que no parece compatible con la presencia de dos fracturas en las mandíbulas, otras dos en el cráneo, costillas rotas y una fractura más en el cartílago de la laringe, según detalla Diario de León.
Denise Thiem había iniciado el Camino de Santiago a principios del mes de marzo en Pamplona. Un mes después, el 5 de abril, salía de Astorga para dirigirse a El Ganso, donde tenía previsto dormir en un albergue. Nunca llegó a su destino. La última persona con la que se vio a esta peregrina de 41 años fue un italiano que después colaboraría en la investigación.
Durante varios meses se investigó sobre el paradero de Denise sin que se produjesen avances significativos. Sus familiares y amigos crearon una página de Facebook para encontrar pistas y la familia contactó con autoridades españolas y estadounidenses. En septiembre, el senador McCain enviaba una petición a Mariano Rajoy sobre una posible intervención del FBI en la búsqueda. El presidente español declinó esa oferta y respondió que los cuerpos de seguridad estaban trabajando sin descanso en la búsqueda de Denise. Un día después de que esa carta se hiciese pública, 300 agentes se desplazaban a Astorga para reforzar las tareas de búsqueda. Pocas horas después era detenido en Asturias Miguel Ángel Muñoz, de 39 años y natural de Madrid. Fue el detenido el que indicó el lugar en el que se encontraba el cadáver, que fue localizado poco después en un monte cercano a una finca propiedad de Muñoz.