Indignación en Lugo porque el Concello cobra la basura tras 59 días de huelga

Lucía Rey / Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

GALICIA

Urbaser y el comité negociaron hasta última hora los flecos de la propuesta planteada por el mediador y avalada por el Concello para intentar solucionar el conflicto

07 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El Concello de Lugo, a través del concejal de Medio Ambiente y portavoz del gobierno local, Luis Álvarez, fue clave en la sexta reunión celebrada entre la dirección de Urbaser y el comité para intentar poner fin a la huelga de la basura que sufre la ciudad desde hace 59 días. Las partes negociaron hasta la madrugada los flecos de una propuesta que tenía que ser refrendada por la asamblea de trabajadores, y que presentó el mediador designado por el Consello Galego de Relacións Laborais, Benigno Sánchez, con la meta de zanjar de una vez por todas un paro que durante nueve semanas ha llenado Lugo de toneladas de basura, suciedad y malos olores. Mientras tanto, indignación es la palabra que define el estado de ánimo de centenares de vecinos que pagan estos días el recibo municipal de agua y basura correspondiente al segundo trimestre del 2014, y en el que no figura el descuento que prometió el alcalde, José López Orozco, cuando en julio, tras más de un mes de huelga, anunció que «non se vai cobrar por un servizo non prestado». «Fun ao banco facer un ingreso e vin que non me descontan nada polos días que estivemos sen recollida de lixo, o que me parece sorprendente», resaltó ayer Eladio Castro, tras presentar una reclamación para que le devuelvan el importe correspondiente a los 11 días cobrados -el paro de los trabajadores de Urbaser comenzó el 9 de junio y el recibo computa hasta el 20-, en los que la calle donde vive acumuló cientos de kilos de residuos junto a los contenedores, no fue baldeada, y los insectos y los malos olores inundaron el ambiente. Igual que en el resto del municipio. El portavoz del gobierno local, Luis Álvarez, declaró más tarde que el descuento se efectuará «como moi pronto» en el próximo pago, previsto para octubre. Con todo, avanzó que se creará una comisión técnica que establecerá las cantidades económicas a reducir, ya que el proceso tiene «unha complexidade impresionante», puesto que será necesario «valorar en que medida se deixou de prestar o servizo».

La situación ha mejorado

«Desde o 9 de xuño retiráronse centos de toneladas. E esa parte, ¿que pasa? ¿Que non custa cartos retirala? ¿Non se paga a ninguén pola retirada dese lixo?», se preguntó el edil, que agregó: «Que ninguén pense que vai desaparecer a cantidade total da recollida porque o servizo si se prestou, non como se tiña que prestar, pero si se prestou».

De esta manera, ayer, en la jornada 58 de huelga, las calles y las parroquias presentaban un aspecto mucho mejor que en las primeras semanas debido al cumplimiento de los servicios mínimos y al trabajo de los operarios de Tragsa, contratados por el Concello cuando los inspectores de Sanidade comenzaron a detectar focos de alerta sanitaria. Ayer hubo 25. Pero los ánimos continuaban caldeados. Tanto entre los particulares como entre los empresarios, como apuntó el presidente de Lugo Monumental, Luis Latorre. «El recibo llegó íntegro, y eso supone, en primer lugar, un incumplimiento de un acuerdo plenario», explicó en referencia a una moción en la que PSOE, PP y BNG acordaron por unanimidad aplicar una rebaja para compensar de alguna manera a los vecinos por los perjuicios causados.

Desconfianza

La promesa de que esa «indemnización» llegará en otoño también genera desconfianza. «É unha escusa de mal pagador porque vai vir outubro e imos estar nas mesmas. Vannos dicir que se hai un problema informático, que se non se puido facer...», reflexionó Castro. «Vamos a confiar en que el descuento lo van a hacer después, pero mientras tanto lo han cobrado, cuando hay muchos particulares que están pasando un mal momento económico, y las calles de Lugo las limpiamos nosotros», completó Latorre, poniendo en valor la iniciativa de hosteleros y comerciantes de la ciudad, limpiando y adecentando el entorno de sus negocios desde el inicio de la huelga. Lugo Monumental recomienda pagar los recibos. «No recomendamos la rebeldía, porque si no lo pagas luego te lo van a cobrar con intereses. Que nadie se pase de listo», manifestó Latorre.