Un coruñés les ha dado el dinero para el pago del enganche y primer recibo
21 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Llevaban seis meses sin luz en la casa de emergencia que les otorgó la Xunta de Galicia en alquiler a instancias del Servizo Sociocomunitario municipal de Narón para evitar que, al no poder pagar su casa, acabasen viviendo en la calle. Y tras seis meses de lucha, tres reclamaciones a Fenosa y una en el Instituto Galego de Consumo, Elena Veiga y sus tres hijos, de 3, 9 y 11 años, por fin disponen de luz en casa. Esta naronesa dio a conocer su caso el pasado jueves a través de La Voz, y desde entonces no ha parado de recibir muestras de apoyo. Incluso, un funcionario coruñés le ha hecho una transferencia de 250 euros para que asuma el gasto del enganche de la luz y el pago del primer recibo.
«Vinieron técnicos de una subcontrata de Fenosa ayer a volver a revisar toda la instalación porque creían que ya debíamos tenerla y no encontraban el fallo. Tuvimos que insistirles en que revisasen todo, que no podíamos seguir sin iluminación, y al final descubrieron que cuando yo había hecho al principio de todo el enganche sin permiso mientras no me daban el alta y vinieron aquí a cortarlo, quien lo hizo dejó parte de la instalación cubierta como si estuviese bien y por eso no había conexión», explica Elena.
La familia no se creía ayer que ya pueden disponer del servicio eléctrico en casa. «Estamos contentísimos, yo es que ni me lo creo que por fin podamos tener luz como en cualquier otra casa. Es un lujo no tener que preocuparme por esto y que mis hijos puedan estar tranquilos en casa», aseguraba la madre. Y es que durante los primeros meses recurrió a la casa de sus padres para ir a dormir cada noche y después a la colaboración de los vecinos de la zona para las tareas diarias como poner la lavadora. Algo que ahora pueden realizar sin problemas además de disponer de la iluminación. «A mis hijos les gusta mucho dormir con una luz del pasillo encendida porque se sienten más seguros, y yo también me había acostumbrado», recuerda Elena. Ahora la familia ya tiene solucionado el problema de cómo pagar la factura del enganche de la luz, gracias a la solidaridad de un funcionario coruñés.
Divorcio
Elena está en proceso de divorcio, vive con sus tres hijos y se encuentra en situación de desempleo percibiendo únicamente la ayuda de 400 euros que otorga el Estado para las familias que se han quedado sin ningún tipo de subsidio, por lo que por sí sola no puede hacer frente al gasto.
Dar a conocer su situación ha suscitado que vecinos de la zona y de la provincia se interesen por su caso para intentar aportar su granito de arena. Los primeros, el colegio en el que estudian sus hijos. «En el festival de Navidad me han querido ayudar dándome juguetes para que los niños puedan tener regalos estas Navidades. Iban a ser unas fiestas muy difíciles porque para mí, aunque suene duro, lo primero es que coman, y agradezco mucho lo que han hecho», agradece Elena.
También, a través de las redes sociales o por teléfono, otras personas se han interesado por su situación y están intentando ponerse en contacto con la familia para ayudar en lo que necesiten. «Agradezco muchísimo que la gente se esté interesando en ayudarme aunque todos estemos pasándolo mal y en una época muy mala. Lo que quería era la luz, y estoy contentísima con tenerla y con que la gente se interese», agradece.