Controlado el incendio que quemó 500 hectáreas entre Quiroga y Larouco

GALICIA

Algunos vecinos han tenido que ser desalojados por la proximidad de las llamas y el humo a las casas

13 ago 2013 . Actualizado a las 04:42 h.

El fuego que se declaró en el municipio lucense de Quiroga (en la parroquia de Vilanuíde) el pasado domingo y que pronto cruzó la frontera provincial para saltar a Larouco (Ourense), cercando el pueblo de Seadur durante varias horas, se convirtió ayer por la mañana en el primer gran incendio forestal (GIF) del verano. Es la denominación que reciben los fuegos que superan las 500 hectáreas quemadas, cifra provisional que desde la Consellería do Medio Rural dan por buena hasta tener los datos finales tras la parametrización.

A las doce de la mañana se levantaba la alerta 1 de emergencia decretada el día anterior, según anunciaba la conselleira, Rosa Quintana, de visita en la zona (ya había estado la noche previa), al considerarse que ya no había riesgo para las personas. En aquel momento, sin querer hablar de que estaba controlado, Quintana avanzaba que el incendio estaba «sin llama» y que hacía horas que el perímetro no crecía. Eso, a pesar de que la niebla imposibilitó que durante horas fueran más de dos los medios aéreos desplegados en la zona.

Al filo de las ocho y cuarto de la tarde, el fuego se dio por controlado, de nuevo apelando a las 500 hectáreas como superficie quemada. Según fuentes del servicio de extinción de incendios, alrededor de 50 pertenecen a la provincia de Lugo, y el resto, a la de Ourense. Aunque estuvo muy cerca de casas y bodegas subterráneas (covas), el fuego no les afectó. Las labores de extinción continuaban al cierre de esta edición. Trabajaban en ello numerosas personas. Durante las más de 24 horas que estuvo descontrolado, el incendio movilizó a 4 técnicos, 29 agentes forestales, 69 brigadas, 26 motobombas, 2 palas, 9 helicópteros, 8 aviones y un total de 111 miembros de la Unidad Militar de Emergencias, que sumaron al dispositivo varias motobombas más. Entre ellos estaba un peón de la brigada forestal de Vilamartín de Valdeorras, que el domingo acabó en el hospital por una herida en una pierna. Fue dado de alta a las pocas horas.