Mil grullas de papel por la paz

FERROL

En la imagen, los alumnos que coordinan la actividad, con algunas de las grullas de papel.
En la imagen, los alumnos que coordinan la actividad, con algunas de las grullas de papel. ángel manso< / span>

Alumnos del instituto de Canido elaboran pajaritos de «origami» para enviarlos a Hiroshima antes del 30 de enero

24 ene 2012 . Actualizado a las 13:38 h.

El próximo 30 de enero se conmemora el Día Escolar de la Paz y la No Violencia y, para celebrarlo, los alumnos del instituto de Canido han puesto en marcha un interesante proyecto que recupera una vieja leyenda japonesa, así como la historia de una de las víctimas de la bomba atómica lanzada por Estados Unidos sobre Hiroshima en 1945.

La iniciativa consiste en la elaboración de mil grullas de papel, que los alumnos esperan enviar en los próximos días al país nipón para que lleguen allí el Día de la Paz. «Hicimos más de 800 y esta semana esperamos tener listas las que nos faltan», comenta Marta García, alumna de tercero de la ESO y una de las coordinadoras del proyecto.

La idea está inspirada en la historia de Sadako Sasaki, una niña japonesa que enfermó de leucemia a causa de la radiación de la bomba atómica. Cuando estaba en el hospital, una amiga suya le llevó una grulla de papel. Y a continuación le contó que, según una vieja leyenda nipona, este tipo de aves pueden vivir mil años y que, si alguien construye mil grullas en origami (arte japonés del plegado de papel) los dioses le conceden un deseo.

Sadako se puso entonces a elaborar las aves de papel, con la intención de ponerse mejor, pero, cuando llevaba hechas más de 600, la enfermedad pudo con ella y la niña falleció. Sus amigos y compañeros de escuela continuaron su misión hasta completar las mil grullas y, desde entonces, escolares de todo el mundo envían figuritas similares al parque de la Paz de Hiroshima, donde se alza un monumento dedicado a la pequeña.

A ese movimiento mundial se han querido sumar ahora los alumnos del instituto de Canido, que llevan más de un semana arañando tiempo a las clases y a sus ratos de ocio para dedicárselos a la papiroflexia. Por la paz mundial. Y en recuerdo de Sadako.

Una idea del profesor Antón Cortizas a la que se ha sumado todo el centro

Los alumnos de 3º B de la ESO del instituto de Canido han puesto en marcha el proyecto de las grullas de papel gracias a uno de sus profesores. «Nos lo propuso el vicedirector del centro, Antón Cortizas, y nos pareció una idea muy bonita», comenta la alumna Marta García.

Aunque la actividad la ha liderado su clase, al final todos los estudiantes del centro se han involucrado en el proyecto. Al igual que los profesores. «¿Que cuándo hacemos las figuras? Pues muchas de ellas cuando estamos en casa, pero también las hemos hecho en clase, en pequeños ratos que nos dejan los profesores, que también nos están ayudando», explicar Marta.

Además, los estudiantes han contado con la colaboración de uno de sus compañeros, Rafael Tapia, también de tercero de la ESO, que es un experto en papiroflexia. Sus amigos cuentan que aprendió la técnica de su abuelo y aseguran que es capaz de hacer «cosas increíbles».

Estos días, además de terminar las grullas que les faltan, los alumnos están plegando las figuras y metiéndolas de cien en cien en cajas de cartón, para su envío a la Oficina de Promoción de la Paz de Hiroshima, la entidad que se encargará de llevarlas a la plaza dedicada a Sadako para su exposición.