Trillo dimite tras asumir Defensa las críticas del informe sobre el Yak-42
ESPAÑA
Asegura que solicitó un relevo rápido «para no interferir en la acción del Gobierno»
13 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El embajador de España en Londres, Federico Trillo, anunció este jueves que deja su cargo tras asumir el Ministerio de Defensa el informe del Consejo de Estado sobre sus responsabilidades en el accidente del Yak-42 cuando ocupaba esa cartera como ministro.
Trillo, que fue titular de Defensa en el Gobierno de José María Aznar (1996-2004), hizo este anuncio en una declaración breve en la embajada española, en la que no dio lugar a preguntas de la prensa. El embajador recordó que «hace ya algún tiempo» comunicó al Gobierno de Mariano Rajoy su decisión de dejar el cargo. «En los últimos días he pedido al Gobierno que este relevo se produjera cuanto antes, para no interferir en la acción del Gobierno», añadió, tras lo cual señaló su intención de reincorporarse a su carrera profesional.
Horas antes de que Trillo realizase esta declaración, Rajoy afirmó que el embajador iba a ser relevado «porque toca», en referencia a la renovación automática de cargos diplomáticos nombrados en el 2012. Pero, aun así, insistió en que respaldaba el giro que la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha imprimido a la postura oficial sobre el accidente, porque, añadió Rajoy, quería mostrar su «cercanía y reconocimiento» a «todas las familias de las víctimas».
Cospedal se reunió el martes con familiares de los 62 militares que perdieron la vida en aquel vuelo y se comprometió con ellos a acatar y asumir íntegramente el contenido del dictamen del Consejo de Estado, que halló responsabilidades del departamento entonces dirigido por Federico Trillo en el siniestro. «La responsabilidad objetiva de la Administración hay que reconocerla», dijo la ministra.
El cambio de enfoque ha cogido a contrapié, entre otros, al ministro de Justicia, Rafael Catalá, quien el miércoles contaba en Onda Cero que no se había explicado bien al decir que ni el Gobierno ni el exministro Trillo tenían que pedir perdón por el accidente. «El perdón está asociado a la culpa» -aclaró-, y en este caso la culpa del siniestro «está clara», «pero sí se tienen que dar disculpas a los familiares de los fallecidos si consideran que no han sido bien tratados», matizó el ministro de Justicia.
«Tarde y mal»
El portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, afirmó que, a pesar de que Trillo abandona la embajada de España, «dimite tarde y mal». «Rajoy nunca debió nombrarle embajador de España en Londres. Todavía tiene que pedir perdón 14 años después», añadió Hernando en su cuenta de Twitter.
En el mismo medio, Íñigo Errejón, número dos de Podemos, decía: «Trillo dimite como embajador en Londres. Nunca debería haber sido nombrado. Ahora tiene aún que pedir perdón por su soberbia y negligencia». Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, se preguntó en un acto en Valladolid si «un PP con mayoría en el Congreso habría obligado al exministro de Defensa a dimitir». «A dimisión de Trillo, vitoria e boa nova para as vítimas do Yak-42 e para quen pensamos que hai que asumir responsabilidades políticas», aseguró, también por medio de un tuit, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón.
La ministra Cospedal comparecerá el lunes ante la Comisión de Defensa. Y el jueves, la Diputación Permanente de la cámara decidirá si convoca un pleno extraordinario para que el Gobierno dé cuentas sobre el caso, sea con explicaciones de la ministra o, como han reclamado varios partidos, del presidente Rajoy.
Trece embajadores jubilados pidieron a Dastis el cese del representante de España en Londres
Dentro de las peticiones de cese de Federico Trillo una vez conocido el informe del Consejo de Estado, el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, recibió el miércoles una carta de 13 embajadores ya jubilados que le reclamaban la destitución inmediata de Trillo «por respeto» a los familiares de las víctimas del Yak- 42, a las Fuerzas Armadas y «a la dignidad del servicio exterior».
En la misiva justifican esta petición porque consideran que Trillo es el «máximo responsable político de la tragedia». La carta la firman los embajadores Pedro Bermejo, Fernando Perpiñá-Robert, Nicolás Martínez-Fresno, José Luis Dicenta, Juan Antonio Yáñez-Barnuevo, Carlos Miranda, Juan Manuel Romero de Terreros, Francisco Villar, Eudaldo Mirapeix, Miguel Ángel Carriedo, Mariano Alonso-Burón, Aurelio Pérez Giralda y Mercedes Rico.
Según Mariano Alonso-Burón, los veteranos que dan la cara representan a un gran número de diplomáticos de carrera que continúan trabajando para el Estado y por tanto están obligados a ser discretos. «Hay malestar en la carrera diplomática con él», señaló a la cadena Ser este diplomático, quien cree necesaria una reparación moral que «llegaría a través de un acto de reprobación a Trillo y quizás a la gente que colaboró con él».
Federico Trillo anunció que volverá a su puesto profesional, que era el de letrado, precisamente, del Consejo de Estado. Trillo cumplirá 65 años en mayo próximo, pero podría pedir prolongar su actividad hasta cumplir los 70. La decisión queda en manos del Consejo de Estado.