Según los documentos, solo en los dos primeros meses de este año, el equipo de Colau, a través de «contratos menores» ha otorgado a dedo tres adjudicaciones a la empresa que dirige el supuesto jefe de la trama
08 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.A dedo. Sin concurso público. Sin pliegos. Sin publicidad. Sin informe de la secretaría del ayuntamiento ni fiscalización previa por parte de intervención. Todo legal, pero todo a través de los polémicos contratos menores de servicios, que escapan de cualquier control y que se han convertido en uno de los principales pozos negros de la corrupción en España. El Ayuntamiento de Barcelona, que desde el 13 de junio del 2015 dirige Ada Colau ( Barcelona en Comú), está haciendo exactamente lo mismo que los consistorios gobernados por Convergència, investigados en la operación Termyca por desviar decenas de millones de euros gracias a la externalización forzada de servicios a la consultora de cabecera del partido, Efial, o su sucesora, la Consultoría en Gestión Innovadora (CGI), las empresas que están en el epicentro de la operación de la Guardia Civil.
Según los documentos, solo en los dos primeros meses de este año, el equipo de Colau, a través de esos contratos menores, ha otorgado a dedo tres adjudicaciones a la empresa (con sus dos diferentes denominaciones) que dirige el supuesto jefe de la trama, Antoni Martos Carrasco, arrestado en el operativo de la Guardia Civil.
El pasado 7 de enero, medio año después de la llegada al poder de Barcelona en Comú, el consistorio de Ada Colau aprobó adjudicar a la Consultoría en Gestión Innovadora 19.166,40 euros para la «asesoría económica, financiera y contable» del Instituto Municipal de Urbanismo durante el 2016. Se trata de una función que -subrayan los operativos- un consistorio como el de la ciudad condal tiene recursos más que de sobra para afrontar.
«Bienestar animal»
Solo unos días después, el día 13, el jefe de Termyca se vio beneficiado con otra adjudicación. Efial Consultoría S.L, todavía con la vieja denominación, se hizo con un contrato de 15.100.80 euros por «apoyo al Departamento de Bienestar Animal». En febrero, el ayuntamiento volvió a premiar a Antoni Martos con otra adjudicación sin publicidad. CGI se hizo con 20.606,30 euros en concepto de «soporte contable y administrativo» de la Fundación Julio Muñoz Ramonet, gestionada por el consistorio. En total, Termyca se ha embolsado del ayuntamiento 54.873,5 euros. Y eso a pesar de que en junio del 2014, un año y medio antes de las adjudicaciones de Colau, el nombre de Efial ya fue señalado por la Guardia Civil, el juzgado de El Vendrell y la Agencia Antifraude de Cataluña como pieza clave de la «trama de 3 %», tras la operación en Torredembarra (Tarragona) que ha destapado la red de corrupción municipal.