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Fomento obliga a Vueling a cancelar más vuelos y amenaza con retirarle la licencia

lucía palacios MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Andreu Dalmau | Efe

Le ordena modificar el plan de contingencia presentado y redactar uno nuevo que incluya más aviones para aumentar la capacidad

06 jul 2016 . Actualizado a las 12:03 h.

Vueling presentó ayer, tal y como le había exigido el Ministerio de Fomento, el plan de contingencia, que incluye más aviones y la cancelación anticipada de los vuelos, medidas que ya están empezando a poner en marcha. Tanto la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa) como Aviación Civil consideran que este plan es «razonable», aunque han formulado observaciones de que tiene que aumentar el número de aeronaves y el de cancelaciones anticipadas, por lo que volverán a reunirse mañana con la dirección para evaluar los medios con que cuenta y la planificación para el fin de semana. Lo que está claro es que la filial de IAG tiene que ponerse las pilas, pues ayer la ministra Ana Pastor advertía de que cuando una aerolínea incumple la ley, las sanciones pueden llegar «hasta la suspensión de la licencia definitiva».

La aerolínea también está teniendo problemas con las autoridades de Italia, donde sus directivos tuvieron que rendir cuentas a la Aviación Civil. Este ente amenazó a la compañía con aplicarle sanciones en caso de que la investigación que llevan a cabo concluya que ha violado el reglamento sobre asistencia e información a pasajeros. El verano pasado, la Aviación Civil italiana ya amenazó a Vueling con retirarle la licencia de vuelo en su país por los retrasos y cancelaciones en Roma.

Ayer, la compañía no pudo recobrar del todo la normalidad, pues a sus problemas operativos se sumó la huelga de controladores franceses. Tuvo que cancelar 66 trayectos de los 700 que tenía programados en su red mundial. Sin embargo, el hecho de que la empresa comunicara estas anulaciones con un día de antelación evitó que se repitieran las colas de días anteriores y, además, la mayor parte de los vuelos despegaran a la hora prevista. Las medidas que anunció de contratar 34 pilotos, alquilar seis aviones e incrementar un 40 % su personal de atención al cliente parece que están empezando a paliar la crisis.

Además de Vueling, otras compañías también se vieron perjudicadas por la huelga en Francia. Al menos se vieron cancelados 61 vuelos entre los aeropuertos españoles y los del país vecino, de los 314 programados, según Aena. Es previsible que hoy se recupere la normalidad, ya que la jornada de paros de los controladores franceses terminó a las 6.00 de la madrugada de hoy.

Concellos gallegos se quejan a la aerolínea, con la que tienen convenios millonarios

Los concellos de Santiago y A Coruña presentaron ayer ante Vueling, con la que tienen firmados convenios millonarios, una queja por las deficiencias en el servicio que está prestando la compañía en los aeropuertos de Lavacolla y Alvedro. El Gobierno compostelano aseguró ayer que también realizará otra protesta a nivel del Estado para que se le apliquen a la citada compañía las sanciones que correspondan. Mientras, el ejecutivo de Xulio Ferreiro dirigió una carta al responsable de planificación de Vueling, Gabriel Schmilovitch, en la que hace constar «la preocupación y el disgusto» por las cancelaciones y retrasos en Alvedro, al tiempo que reseña que «la calidad del servicio y la operativa ofrecida por su empresa se encuentran en estos momentos muy por debajo de los estándares de calidad y fiabilidad esperables». Las autoridades coruñesas, que aportan al año 1,4 millones de euros a Vueling en promoción turística, reclaman en la misiva datos sobre el total de desvíos y cancelaciones registrados en los vuelos con origen y destino en Alvedro así como de sus causas, informa Xosé Vázquez Gago.

Las subvenciones directas a Vueling por operar en Lavacolla fueron suprimidas hace ya años por parte de la Xunta y del Concello de Santiago. Eso sí, aún sigue recibiendo una cantidad indeterminada de la partida de 2,3 millones destinada a promoción turística en concepto de publicidad. La Xunta sigue el mismo procedimiento desde el 2012, cuando se eliminaron las subvenciones después de haber invertido 11 millones entre los tres aeropuertos gallegos, informa Carlos Rey.

En cuanto a las incidencias registradas ayer en Galicia por la crisis en la aerolínea con base en Barcelona, hay que reseñar que solo en Lavacolla hubo retrasos, de una hora uno procedente de Barcelona, de hora y cuarto otro que llegó de Alicante y una situación similar en las salidas, con retrasos de tres, una y dos horas en los vuelos a Barcelona, Málaga y Alicante, respectivamente. También el que partió para Ámsterdam y el que llegó de la capital holandesa superaron demoras de una hora.