El bróker de caza Jeff Rann, anfitrión y compañero de batidas

mateo balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

15 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

En el argot cinegético cazar los cinco grandes es lo que a la tauromaquia cortar las orejas y el rabo. Preciadas piezas para los cazadores de todo el mundo que pagan un dineral para viajar a la selva africana en busca de los máximos trofeos: elefantes, búfalos, leones, leopardos y rinocerontes.

Empresas como la de Jeff Rann, el bróker de caza que aparece en una foto junto al rey en Botsuana en el 2006, con un paquidermo abatido a sus espaldas, y también en la de los búfalos, se ocupan de organizar safaris. Rann sacia la adrenalina de sus clientes en las mejores fincas del delta del Okavango, al norte del país, con residencias de lujo y los mejores cazadores de la zona para que nada falle. Una estancia de doce días en un campamento con licencia para matar un elefante, la pieza más codiciada, supera los 37.000 euros según tamaño. Un leopardo o un león puede llegar a 36.000, el búfalo ronda los 23.000 y de ahí se baja hasta los 10.000 en función del animal. Rann, amigo del rey, se presenta como un avezado cazador profesional que emprendió su carrera en 1977, tras un aprendizaje de tres años en Zambia. «Vendría a ser un bróker de caza, un tipo que empezó desde abajo y acabó convirtiéndose en el dueño de safaris, alquila las mejores fincas y dispone del mejor personal», comenta una cazadora profesional que ha estado en batidas en la selva africana.

No se conoce si don Juan Carlos se hallaba en un campamento de Rann cuando se rompió la cadera, pero la relación por la caza viene de lejos; de hecho, este colgó las citadas fotos junto al monarca en su web, algunas del 2006. «No es habitual que brókeres como Rann hagan safaris con sus clientes, pero en el caso del rey es lógico que lo acompañe», señala esta cazadora.

La fatídica caída se produjo a las cuatro de la mañana, con la noche aún cerrada, «la hora más propicia para matar felinos como el leopardo o el guepardo que acuden a la llamada del cebo de antílope», cuenta la experta. Por lo que no sería de extrañar que la caza de estas fieras estuvieran en el programa.