Marín procesará para alimentación y cosmética los descartes pesqueros

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Ricardo Pérez -segundo por la izquierda- es el coordinador del proyecto.
Ricardo Pérez -segundo por la izquierda- es el coordinador del proyecto. m. moralejo< / span>

Vigo lidera un proyecto europeo para acabar con el desperdicio de especies

17 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Reducir al mínimo los millones de toneladas de pescado que cada año se devuelven al mar y buscar valor comercial a especies que ahora se desprecian. Son los dos ejes sobre los que pivotará el proyecto europeo Life iSeas que lidera el Instituto de Investigaciones Marinas (IIM) de Vigo.

Para ello serán fundamentales los datos que aporten dos de los socios, el Instituto Español de Oceanografía y Opromar, la organización pesquera de Marín. El primero pondrá los científicos para realizar un completo mapa de capturas no deseadas, tanto por zonas como por especies, y los segundos pondrán la flota. Así, llegado el caso, los buques evitarán echar la red en aquellas áreas en las que se compruebe que existen mayores poblaciones tanto de inmaduros como de especies que carecen de interés comercial. El calendario de embarques de los observadores se establecerá en septiembre.

Ricardo Pérez, investigador del IIM y coordinador del proyecto, subraya que la sociedad percibe los descartes pesqueros como un problema no solo ecológico, sino también socioeconómico. «Este problema es de especial relevancia en Galicia, donde el sector representa cerca del 3 % del PIB», dice.

El proyecto, en el que también participan el Centro de Supercomputación de Galicia, el Centro Tecnológico del Mar, la Universidad de Santiago y Talleres Josmar, incluye la creación de dos plantas piloto en la lonja de Marín, con el objetivo de buscar rentabilidad a los descartes a través de su transformación industrial. En la primera se procesarán los destinados al consumo humano, y en la segunda, el resto.

El estudio, que cuenta con un presupuesto de 4 millones de euros -de los que la mitad correrán a cargo del programa LIFE+ de la UE- se realizará a lo largo de 4 años. Será dentro de uno cuando se inicie la actividad de las plantas. Dos de las especies con las que seguro se trabajará serán el jurel y la caballa, cuya captura no puede ser evitada a día de hoy y muy frecuentemente es descartada por rebasar la cuota establecida. El lirio formará también parte de esa lista.

Entre otros productos, los descartes para consumo humano terminarán convertidos en pastas para croquetas o lasañas, patés, porciones... «En España estamos acostumbrados a consumir el producto entero, pero en otros países prefieren los elaborados», afirma Ricardo Pérez.

Las industrias cosmética, farmacéutica y biomédica serán las principales beneficiarias del resto de los productos: colágeno, quitina...